Comisiones Obreras ha denunciado que los vigilantes de las zonas verdes y azul de aparcamiento de Barcelona están recibiendo presiones de la dirección de BSM (Barcelona Serveis Municipals) para que multen más por estacionar el coche indebidamente.

La sección sindical de CC OO-BSM considera que "las soluciones a la movilidad en Barcelona no es presionar a los que ponemos las multas para que lo sancionemos todo" y no cree que la Guardia Urbana esté recibiendo la misma presión que ellos para incrementar las sanciones.

"Tenemos que mantener un criterio humano para poner las multas. No tratamos con ladrillos. Una persona puede estacionar un momento en la zona azul delante de un colegio para llevar a su niño a la puerta del centro. No sé si este estudio coteja este tipo de situaciones", afirman desde el sindicato.

Por su parte, BSM niega que esté presionando a los vigilantes y asegura que les ha pedido "rigor en la realización de sus tareas para mantener bajos los niveles de indisciplina".