La pintura fue encontrada en una casa en el sur de Reino Unido colgada en la pared junto a dos retratos de caballos de los artistas ingleses George Stubbs y Alfred Munnings.
"De acuerdo con lo que se sabe, él era el típico artista sin dinero y el sexo era uno de los pocos placeres que se podía permitir" dijo Guy Schwinge de la casa de subastas Duke, donde se vendió la pintura.
El óleo de Munnings, que representa a una yegua irlandesa, se vendió por 65.755 libras, incluyendo la prima, a un coleccionista privado que quería el cuadro para dárselo a su mujer como regalo de cumpleaños atrasado.
El Stubbs, que también muestra a un caballo gris, llevó las pujas hasta las 45.000 libras, sin incluir la prima dijo Schwinge. Se esperaba que los tres trabajos alcanzaran precios en torno a las 100.000 libras.
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