Muchos vallisoletanos entran a currar a las diez de la mañana y su horario va hasta las dos de la tarde, hacen una pausa para comer y regresan al tajo de 16.30 a 20.00 horas.
La mayoría se levantan para llevar al cole a sus hijos y no los ven hasta la noche. Si tuvieran un horario europeo, adelantarían su jornada y reducirían el tiempo del almuerzo para estar en casa antes de las seis de la tarde. O lo que es lo mismo, tendrían tres horas más de ocio.
Medidas insuficientes
Todas las medidas de conciliación que se fomentan desde la Junta y el Ayuntamiento no son suficientes. «Somos el peor país en materia de conciliación laboral y familiar», aseguraron ayer en Valladolid los ponentes de un debate que pretende fomentar un horario más flexible.
Según ellos, la jornada ideal comienza entre las 7.30 y las 9.00 horas, termina entre las 16.30 y las 18.00 y tiene una pausa breve para almorzar de entre 45 y 60 minutos. «Incluso daría tiempo a una siesta light de 10 ó 15 minutos, recomendable por muchos médicos», asegura Ignacio Buqueras, presidente de la asociación para racionalizar los horarios españoles.
Cuestión de igualdad
Las mujeres son las más perjudicadas por nuestro estilo de vida, ya que en el 87% de las familias se encargan ellas de los hijos y en un 60%, también de los ancianos.
Familiarmente responsables
No se trata de currar menos sino de organizarse mejor y dar más valor al tiempo. La Fundación + Familia ha elaborado unas normas que deben seguir aquellas empresas que, como las normas ISO de calidad o de prevención de riesgos, quieran ser consideradas familiarmente conciliadoras y responsables.
Ya hay 70 empresas de toda España certificadas, 6 de ellas en Castilla y León y otras tantas que están ahora mismo en proceso.
Roberto Martínez, presidente de + Familia
1¿Un buen horario es positivo sólo para los trabajadores? En absoluto, las empresas también salen beneficiadas en muchos aspectos. Conciliar la vida familiar y laboral de sus empleados les da reputación, retienen más a sus talentos, el buen clima laboral facilita la productividad, en fin, hay muchas ventajas para las empresas.
3¿Es sólo cuestión de horarios? No, eso es una parte fundamental de la conciliación, pero hay muchas medidas más y a muchos niveles. Hay también experiencias positivas de empresas que tienen gimnasio en el centro de trabajo (un tiempo que no pierdes en ir al tuyo), que dan masajes terapéuticos o que permiten un pequeño descanso en sillones relajantes. En ese sentido las opciones no tienen límites.
4¿Hay interés de las empresas en estos cambios? Como decía Darwin, no sobreviven los más fuertes ni los más inteligentes, sino los que tienen capacidad de adaptarse a los cambios de su entorno. Es una necesidad para las empresas, y de hecho, en poco tiempo, hay más de 70 que se han certificado como empresa familiarmente responsable.
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