La vista oral estaba señalada en el Juzgado de lo Penal número 1 de Oviedo, a las 10.45 horas pero no ha llegado a celebrarse al llegar la defensa del condenado, ejercida por David Gato, a un acuerdo con el fiscal.

Así, Fiscalía ha aceptado la concurrencia de las circunstancias de toxicomanía y reparación del daño y ha aceptado una rebaja de la pena, que en su petición inicial ascendía a cinco años de prisión.

Según ha explicado el letrado, una vez se dicte sentencia, solicitará la libertad para el condenado, condicionada a que acuda a un centro de desintoxicación. Así, Gato, ha indicado que su defendido actuó motivado por su adicción y colaboró con las fuerzas policiales desde el primer momento en el esclarecimiento de los hechos.

LOS HECHOS

El Ministerio Fiscal sostiene que, sobre las 17.00 horas del día 11 de noviembre de 2018, el condenado entró, a través de la ventana de la cocina que da al patio de luces, que estaba abierta, de una vivienda de la calle Valentín Masip de Oviedo, y se apoderó de unas llaves que había en un cuenco y que fueron recuperadas en su poder.

En hora no precisada pero comprendida entre las 14.50 horas del día 23 y las 02.00 horas del 24 de noviembre de 2018, el acusado entró por la ventana de la cocina que da al patio de luces, que estaba abierta, en otro domicilio del mismo portal la calle Valentín Masip. De su interior se apoderó de 150 euros en efectivo, de un reloj con caja y pulsera de oro valorado en 1.100 euros y de varios juegos de llaves valorados en 60 euros.

Ni el dinero ni los efectos fueron recuperados. Sobre las 20.05 horas del día 29 de noviembre de 2018, el acusado entró a través de la ventana de la cocina que da al patio de luces, que estaba abierta, de otro domicilio del mismo edificio de la calle Valentín Masip de Oviedo. Se apoderó de una cartera con documentos, diez euros y un teléfono móvil. La cartera y el teléfono fueron recuperados en poder del acusado.