Los compradores de vivienda están dispuestos a pagar hasta 30.000 euros más por una vivienda que el año pasado, según un estudio de la Universidad de Oviedo presentado hoy por la Confederación Asturiana de la Construcción.

En 2006, los asturianos querían pagar un máximo de 210.000 euros y en 2007 la cifra se elevó a 240.000. La entrada que podían dar fue la misma los dos años: 24.000 euros. Sin embargo, en 2007 los compradores estaban dispuestos a pagar 200 euros más de hipoteca (1.200 como máximo)

La mayor demanda residencial se encuentra en la zona central de Asturias. Así, entre 2008 y 2010 la demanda total en esta área geográfica podría llegar a las 24.756, lo que se traduce en una demanda estimada de 8.252 viviendas anuales para cada años del trienio. Para toda la región, serían unas 11.500 viviendas cada año.

En cuanto al número de personas que desean comprar en cada municipio, independientemente del lugar de residencia, Oviedo se coloca a la cabeza de esta clasificación (11,1 %), seguido de Gozón (12,40 %) y de Avilés (10,44 %).

Desde la patronal de la construcción se apunta a que el sector tiene un futuro inmediato en los próximos tres y cuatro años, "sin ningún problema".

El informe de la Universidad de Oviedo también muestra que el importe medio del alquiler se situó en 2007, para los municipios de la zona centro, en los 380,17 euros, por los 326,17 euros de 2006. Esta cifra supone un incremento del 16,59 por ciento. "Habíamos mantenido que determinas ayudas al alquiler podrían favorecer este aumento, lo que no significa que estuviésemos en contra", señaló Apolinar Cuesta.

"Nosotros defendemos que la vivienda nueva no debería subir más de dos o tres puntos por encima de la inflación", afirmó Apolinar Cuesta, quien añadió que los precios de vivienda nueva "rotundamente" no va a bajar.

"Esto demuestra nuestra posición de que la actividad de promoción de viviendas en Asturias es fuerte", afirmó, en rueda de prensa, el presidente del Grupo de Promotores de la CAC, Apolinar Cuesta. En este sentido, el representante de la CAC manifestó que la producción del sector residencial en el Principado no está afectada por la "crisis" o la "desaceleración" económica.

La CAC también también está convencida de que no se va a registrar una "destrucción de empleo" en el sector residencial, ya que se continuará construyendo vivienda nueva. "Desde nuestro punto de vista no se va destruir empleo", aseguró Apolinar Cuesta, quien aseguró que los promotores asturianos van a cumplir con una oferta adecuada a la demanda existente en el mercado.

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