Los usuarios de los autobuses de Maisonnave con dirección al centro de Alicante pierden 150.000 horas al año en uno de los mayores puntos negros del tránsito rodado en la ciudad: en el cruce semafórico de la citada vía con la de Federico Soto, "por donde pasan cinco millones de viajeros al año; son 741 movimientos de buses al día por esta zona", expone Javier Cobela, portavoz de la Plataforma Comarcal por la Movilidad Sostenible (PCM), asociación que aglutina a más de 30 colectivos.

Este desbarajuste se debe, según Cobela, a que los conductores de autobús "se topan con hasta cuatro semáforos en apenas 200 metros cuando los pillan en rojo" al venir procedentes de la plaza de la Estrella, dar el giro por la Cruz de los Caídos y seguir por Calvo Sotelo con dirección a Luceros por Federico Soto. En este breve trayecto "se emplea muchísimo tiempo: un minuto y 45 segundos; es una pérdida que no beneficia a nadie", denuncia Cobela, agravado ahora además por las obras de renovación de aceras en Maisonnave.

Pero si el giro se hiciera directamente de Maisonnave a Federico Soto, tal y como la PCM propone, "tan sólo se emplearían 10 segundos, por lo que se ahorraría un minuto y medio de tiempo". Los representantes de los conductores de autobús de Masatusa reconocen "la amplia pérdida de tiempo" que se efectúa en este giro y señalan también el cruce de la calle México con la avenida de Elche como otro de los puntos con más conflictividad para ellos, sobre todo en la línea 01.

El "deficiente" servicio que ofrece el transporte público en Alicante incentiva el uso del vehículo particular. Y la entrada en funcionamiento de la línea del tranvía en Mercado Central no ha aligerado los atascos en el centro, sobre todo en horas punta. Según el Centro de Coordinación de Tráfico, seis de cada diez alicantinos siguen utilizando el coche o la moto para ir a trabajar.

¿Habrá carril bus y bici en la avenida de Dénia?

A falta del beneplácito último de la Generalitat, y tras el visto bueno del Ayuntamiento de Alicante, Subús, Tele Taxi y la PCM, la avenida de Dénia contará con dos carriles bidireccionales segregados para cada sentido destinados al transporte público (autobuses y taxis) y ciclista de 2,20 metros de ancho junto a las aceras.

"El conseller (Mario Flores) ha visto con buenos ojos la propuesta que hemos presentado, ya que no se modifica el proyecto original hecho por el Consell de ampliación de carriles (hay tramos con hasta ocho y nueve) y además se garantiza la seguridad del ciclista", destacó ayer el portavoz de la PCM.

Según Cobela, el carril destinado para los autobuses tendría apeaderos y marquesinas en cada parada; "de esta forma, al detenerse e incorporarse no entorpecería la circulación", comentó.

Por su parte, Manuel Martínez, portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), apostilló que "el 90% de los vehículos que transitan por la avenida de Dénia sólo lleva un ocupante en su interior, por lo que se podrá aprovechar el uso del transporte público aquí si se habilitan los carriles".