Todo ocurría la madrugada del sábado 2 de junio. Dos menores de 17 años que se dirigían a la estación de tren Granollers Centre tras salir de la discoteca Bora Bora en Montornès del Vallés (Barcelona), dieron patadas a una familia de patos hasta que murieron

Los patos se encontraban en una de las balsas cercanas y piensan que no huyeron por estar acostumbrados a los humanos. Varios vecinos presenciaron los hechos: "Se pusieron a jugar con los patos como si fueran una pelota dándoles patadas y saltando sobre ellos", explica Teresa More al diario La Vanguardia.

"Mataron a siete y otro quedó muy malherido", explica una vecina. A la madre todavía no le han encontrado. De toda la familia de Ánades reales, especie de los patos, solo dos consiguieron salvarse y huir de los menores. Los dos jóvenes, vecinos del pueblo, han sido denunciados por los vecinos a la policía local y se les imputa un delito de maltrato animal.

El presidente de la Asociación de Vecinos de Can Junyent, que se creó para visibilizar las quejas de los vecinos, asegura que "fue un ensañamiento". Según su testimonio "sucedió en un intervalo de 20 minutos", cuando la policía encargada de cerrar la discoteca fue a atender otra emergencia.

Desde la asociación de vecinos solicitan mayor presencia de los Mossos entre las 6:00 y las 7:00 horas, que es cuando mayor actos vandálicos y violentos se producen, coincidiendo con el cierre de la discoteca. "Tenemos miedo cada vez que se acerca el fin de semana", sentencia el alcalde de Granollers, Josep Mayoral.