PSOE y PRC volverán a gobernar juntos en Camargo durante los próximos cuatro años tras el pacto de investidura y gobernabilidad que han firmado este jueves y que volverá a hacer alcaldesa a la socialista Esther Bolado. La regidora en funciones y el regionalista Héctor Lavín "tenían claro que debían continuar juntos", con independencia del resultado de las negociaciones entre ambos partidos a nivel regional.

"Nos merecíamos una segunda oportunidad", ha dicho Bolado, después de una legislatura compleja, de gobierno en minoría y mucha "crispación".

En la misma línea, Lavín ha afirmado que lo que han vivido la pasada legislatura, con el "bloqueo sistemático" de todos los proyectos, "no es una normalidad democrática", y ha señalado que aunque tanto Bolado como él son "gente de partido y respetan las decisiones de la dirección", "tenían claro el pacto" y disponían también de "la suficiente autonomía para tomar decisiones aunque no se hubieran desbloqueado las negociaciones a nivel regional". Aún así, han optado por la "prudencia" para "respetar los tiempos".

Tanto el PSOE como el PRC se han reunido con las otras dos formaciones que integran la nueva Corporación, PP y Ciudadanos. Bolado ha explicado que Cs le trasladó su deseo de entrar a formar parte del gobierno, a lo que la alcaldesa en funciones respondió que su principal socio era el PRC.

Con el PP, en el que Amancio Bárcena ha sustituido como cabeza de lista al exalcalde Diego Movellán, "no se habló de ningún tipo de negociación", y la socialista les ha pedido que "no se repita la crispación" de la legislatura que ahora termina.

Por su parte, Lavín ha desvelado que tanto el PP como Cs han ofrecido la Alcaldía al PRC y formar un tripartito, circunstancia que le ha "sorprendido" viniendo de quien hace cuatro años habló de pactos "frankestein" firmados con "nocturnidad".

En 2015, PSOE y PRC formaron un tripartito con el concejal de Ganemos y con la abstención de IU dejaron en la oposición al PP, que fue la lista más votada con 10 concejales de 21. Sin embargo, ahora el PSOE con ocho concejales, y el PRC con cuatro, disponen de una mayoría holgada (la mayoría absoluta está en 11) para dar "estabilidad" a la acción política y asegurar la continuidad de proyectos, y con ese objetivo han firmado el pacto, que se basa en los principios de negociación, comunicación permanente, lealtad y cortesía.

Lavín ha asegurado que "las negociaciones han sido exactamente idénticas a hace cuatro años, con transparencia, claridad, a la vista de todos y con normalidad". Ha añadido que lo que ha primado "no es conseguir la Alcaldía a cualquier precio o los sillones, sino el interés de los vecinos y el objetivo de poner a CAmargo en la punta de lanza del arco de la bahía y de la comunidad".

El pacto contempla como acciones prioritarias el plan general de ordenación urbana (PGOU), el cubrimiento de las vías, ayudas de estudio para bachiller y FP, mejora de las instalaciones deportivas, remodelación de La Vidriera, apoyo formativo y medios para la violencia de género, relación y valoración de puestos de trabajo (RPT-VPT), nuevo contrato de basuras y limpieza viaria, carretera del Pendo y desarrollo turístico del entorno, parque en Revilla, asfaltados y modernización de polígonos industriales, estudio de viabilidad de una piscina de 50 metros y de un pabellón polideportivo en Escobedo, nueva pavimentación para el parque de Cros, albergue, nuevo espacio para los jóvenes y oficina de información y turismo.