Un total de 416 profesores pidieron la baja por depresión durante el curso 2006-2007 en la provincia de Alicante, según la Conselleria de Educación. La razón principal es la mala convivencia: algunos de sus alumnos crean mal ambiente en clase e, incluso, llegan a amenazar o acosar a los docentes, según fuentes del sindicato ANPE.

José Ramón García, el presidente del sector de Enseñanza de CSIF Alicante, indicó a 20 minutos que podrían ser muchos más los afectados por este mal psicológico, que va a más, ya que hay 21.000 profesores en la provincia y 416 casos «son pocos».

Además, desde la federación de Enseñanza de UGT aseguran que, a muchos maestros les dan la baja por causas musculoesqueléticas que, en realidad, esconden una depresión. Éste es uno de los síntomas de esta enfermedad, que es difícil de valorar.

A pesar de que un porcentaje de estas bajas son endógenas o por razones personales de los docentes, otras muchas están relacionadas con su entorno laboral.

Desde la federación de Enseñanza de CC OO subrayan que, si un maestro tiene un curso difícil, la ley de Prevención de Riesgos Laborales indica que se deben evaluar los riesgos. Esto no se hace, y lo pagan los docentes.

«Ya no puedo más, ¿qué hago?»

El sindicato ANPE tiene un servicio telefónico (676 269 768), llamado El Defensor del profesor, para atender jurídica y psicológicamente a los docentes con problemas. Desde marzo de 2006 hasta finales del año pasado recibió 86 peticiones de ayuda de toda la Comunitat. La mayoría fue por problemas para dar clase, amenazas de alumnos, agresiones físicas y desatención de la dirección..