«Es un cauce administrativo que no nos corresponde. La moción no es para nada que nosotros podamos hacer». Así de rotunda, y pasando la pelota a la Xunta, respondió la concejala de Hacienda y portavoz del Gobierno local, Carmen Marón, a la pregunta de si el Ayuntamiento pediría la revisión de los expedientes de los adjudicatarios de viviendas protegidas en Novo Mesoiro, tal y como reclaman los vecinos.

Minutos antes, en el pleno de la corporación local, el Ayuntamiento votó en contra de una moción del grupo municipal del PP en la que se pedía instar a la Consellería de Vivenda a revisar todos los datos «dado el grado de alarma social» creado por la publicación de las listas.

De hecho, según publicó 20 Minutos el pasado 26 de marzo, en ese listado aparecen los nombres de tres personas ya fallecidas.

En el pleno, que apenas duró media hora, la concejala de Asuntos Sociales, Silvia Longueira, criticó a los representantes del PP por «sumarse a la confusión usando la calumnia».

"De forma mezquina han insinuado que el PP podía estar detrás de esto. Ustedes confunden reinsertar con dar pisos y no hay peor mentira que una verdad a medias», respondió la edil popular, Pilar Farjas.

Reunión interdisciplinar

Al margen de las polémicas, este miércoles se constituirá la comisión de integración, en la que estarán representados vecinos de Eirís, Mesoiro, Los Rosales y O Ventorrillo, además de Ayuntamiento, Xunta, Subdelegación del Gobierno, colectivos antidroga y asociaciones de gitanos.

Esta comisión será la que prepare un itinerario formativo y educativo para integrar a cada familia de Penamoa. Además, Novo Mesoiro aplaza las protestas (que inició el pasado 16 de marzo) durante las próximas dos semanas, en las que esperan respuestas concretas por parte del Ayuntamiento.

"No fue capaz ni de mirarnos a la cara"

El pleno se preveía largo, por tratar el asunto de Mesoiro, pero el debate se quedó en escasos cinco minutos. Y eso a los vecinos del joven barrio no les sentó del todo bien. A la salida, algunos aseguraban sentirse realmente decepcionados.

"Parece mentira que cobren por hacer algo, yo no vuelvo a votar a ninguno de éstos ni loco», decía un vecino. Lo peor que se llevaron de la sesión fue la actitud del alcalde, Javier Losada. «Estaba viéndonos frente a él y no fue capaz ni de mirarnos a la cara», explicaba uno de los asistentes.