Ambas organizaciones critican las condiciones de trabajo en Arcelor que han empeorado en los últimos meses, lastran la capacidad de organización de las empresas y generan tensiones entre los trabajadores de las mismas.

Según han denunciado a través de una nota de prensa "los retrasos en los tiempos de carga y descarga en las instalaciones de Arcelor, que superan con mucho los tiempos previstos y pueden llegar a alcanzar las 18 horas, transmiten una falta de organización que está causando muchos trastornos entre los profesionales".

Desde ambas organizaciones aseguran que esto supone "importantes problemas para la organización diaria de las empresas de transporte, obligadas por ley a respetar tiempos de descanso muy rígidos". Además, según han apuntado "repercute en los conductores que "son presas de disgusto y estrés al tener que permanecer esperando durante horas, y, en condiciones que han sido calificadas de tercermundistas en numerosas ocasiones por las condiciones de las zonas comunes, ausencia de baños e imposibilidad de disponer de agua".