Según el sindicato, el martes por la mañana, cuando dos funcionarios se disponían a abrir la celda de un interno para salir al patio, el preso "dio tres puñetazos a uno de los trabajadores, hecho que le supuso tres puntos de sutura en la cara".

"El centro penitenciario de Ponent tiene muchos internos del este con graves problemas psiquiátricos y nosotros no estamos preparados para acoger este tipo de personas", apunta el sindicato, que pide que estos internos se desplacen a otro espacio.

El sindicato reclama que se cubran las vacantes de funcionarios que existen actualmente en la prisión de Lleida, por personal que se ha jubilado recientemente o bien que está de baja laboral.

Por su parte, la Conselleria de Justicia ha señalado a Europa Press que el funcionario requirió asistencia médica y ha causado baja laboral.

Justicia precisa que el suceso de produjo sobre las 10.00 horas, cuando los funcionarios abrieron la puerta al preso que se encontraba en el Departamento de Régimen Cerrado y que el interno ya ha sido trasladado a la cárcel de Quatre Camins, en La Roca del Vallès (Barcelona).