Laura-Ann Barr, una influencer norirlandesa que tiene 64.000 seguidores en Instagram, cumplió uno de sus sueños cuando fue invitada a una fiesta el pasado miércoles en los jardines del palacio de Buckingham. Consciente de que podría conocer en persona a la reina Isabel II, decidió hacerle un regalo a la monarca y grabarlo en vídeo. Y lo logró.

En una story de su cuenta, Laura-Ann muestra cómo logra colocarse en primera fila ante la llegada de la monarca, a la que le entrega un ramo de flores. El gesto de la influencer es una ruptura del protocolo, porque la reina no se para para saludar a nadie ni para recibir regalos, pero en este caso, la monarca sonrió, dio las gracias y recogió el ramo de flores... para inmediatamente dárselo a una de sus damas de compañía.

La asistente, con exquisita educación, se acercó a Laura-Ann y le dijo: "Es más fácil que las lleve yo, y la reina las pueda tener cuando entremos bajo techo". Sea como sea, Laura-Ann consiguió su propósito.