Tras el periodo de preinscripción para el curso que viene, a 151 familias de la capital catalana todavía no se les ha asignado plaza en P3 y otras 280 están a la espera de asignaciones en primero de ESO. Con el objetivo de dar solución al mayor número de afectados posible, el Consorci d'Educació de Barcelona ha abierto ocho grupos adicionales y ha incrementado la ratio de alumnos en otros 164, a 26 en P3 y a 31 en Secundaria. El día 12 de junio se conocerá la asignación definitiva de plazas.

Lo ha explicado este miércoles el presidente del ente, Josep González-Cambray, que ha detallado que se han abierto cuatro grupos de P3 no previstos en la oferta inicial en las escuelas Fort Pienc, Jaume I, Doctor Ferran i Clua y el instituto escuela El Til·ler, y otros cuatro en primero de ESO en los institutos Flos i Calcat, Martí Pou, Doctor Puigvert y Príncep de Viana.

También ha señalado que de los 164 grupos donde se ha aumentado la ratio, 59 pertenecen a 38 escuelas públicas de P3; 65, a 22 centros públicos de primero de ESO; y 40, a 14 concertados del mismo curso.

"No nos gustan los incrementos de ratio pero en algunas zonas es inevitable", ha apuntado González-Cambray, que sin embargo ha asegurado que estos "no perjudicarán la calidad" de la enseñanza.

Ha explicado, asimismo, que "el objetivo" es aumentar la oferta de plazas públicas en un futuro, para lo que se prevé la construcción de nuevos edificios, darle "un uso educativo a equipamientos" y aplicar el decreto ley que aprobó el martes el Govern para que centros privados y municipales puedan integrarse en la red de la Generalitat. Por el momento, lo han solicitado cuatro escuelas e institutos de ayuntamientos y seis centros de titularidad privada, ha informado el conseller de Educació, Josep Bargalló. Por su parte, Cambray ha añadido que de los privados, la mitad son de Barcelona, donde no hay ninguna municipal que lo haya pedido.

En P3 ha habido una demanda de 12.489 plazas, 6.425 en centros públicos (51,4%) y 6.064 en concertados (48,6%), con lo que por segundo año consecutivo las escuelas públicas han sido las más solicitadas.

El 98,75% de las familias ha obtenido plaza en una de las opciones demandadas y el 93,47% lo ha hecho en la primera, un 1,16% más que en el curso 2018-2019. Sin embargo, 131 se han quedado sin asignación en la pública y 20, en la concertada. Suman un total de 151, un 43,2% menos que el año pasado (266).

En primero de ESO, la demanda de plazas ha descendido levemente respecto al curso anterior. En la pública se han solicitado 4.939 por las 4.953 de 2018-2019 y en la concertada, 1.947 por las 1.948 de entonces.

El 95,9% de las familias ha obtenido plaza en uno de los centross demandados, un punto más que el año pasado, y las que han entrado en su primera opción han sido el 89,4%, un 1,2% más que el curso pasado. Aún así, 135 se han quedado sin asignación en la pública y 145, en la concertada.

Por primera vez, se han preasignado plazas a alumnos vulnerables. En P3 se han detectado 831, de los que el 85% ha hecho uso de la reserva de plaza y el 15% restante ha optado por la ordinaria. En primero de ESO, se han detectado 1.247 alumnos en situación de vulnerabilidad y el 82% ha usado la reserva de plaza.

Mientras que el curso pasado, el 79% del alumnado en situación de vulnerabilidad fue asignado a un centro público y el 21% a uno concertado, para el curso que empieza en septiembre el reparto será del 73% y el 27%, respectivamente, en P3, y del 62% y el 38% en primero de ESO.

Para el comisionado de Educació, Miquel Essomba, estas cifras demuestran que los concertados asumen más «responsabilidades» en la educación inclusiva.