En el caso de Martínez Laorden, el portavoz del equipo de Gobierno municipal, Miguel Sainz, ha mostrado su satisfacción por "cumplir con el compromiso que la alcaldesa y toda la Corporación adquirimos tras el fallecimiento del que fue uno de los artífices del Logroño moderno".

"Una deuda -ha añadido- que la ciudad tenía con él y que quedó también reconocida a través de una campaña ciudadana a través de change.org para que un espacio público llevara su nombre". Javier Martínez Laorden, fallecido en 2016, fue por más de 40 años arquitecto municipal y director general de Urbanismo del Ayuntamiento logroñés.

Respecto a la elección de San Juan Pablo II para denominar a partir de ahora la calle en la que está ubicada la Escuela de Idiomas, Sainz ha recordado que "era uno de los nombres aprobados por el Ayuntamiento desde hace tiempo y que estaba pendiente de ubicar".

Estos cambios se vienen a sumar a los seis que se promovieron en agosto de 2016 y a tres más de julio de 2018, dentro del desarrollo del acuerdo vinculado a dar cumplimiento a la Ley de Memoria Histórica que en nuestra ciudad afectaba a un total de 17 calles.

"Quedarían por tanto otras seis pendientes -ha señalado Miguel Sainz- que se tendrán que ir modificando, considerando los efectos que el cambio puede tener al ser en algunos casos calles con gran actividad comercial o teniendo en cuenta otras circunstancias como el poderse convertir en nombres genéricos".

En el primer supuesto se encontrarían Victor Pradera, García Morato y Jorge Vigón, para las que ya se han recibido escritos de posibles afectados sobre la inconveniencia del cambio; y en el segundo, Milicias, Alférez Provisional y Yagüe. En esta última, con reticencias de los vecinos del popular barrio.

Además, Sainz ha hecho referencia a la necesidad "de ser cautelosos a la hora de llevar a cabo la sustitución de los nombres, porque ya se han dado casos de impugnaciones y sentencias que han provocado la paralización de los acuerdos".