El PP se ha comprometido a trabajar "sin descanso" para ayudar a Solvay en el desarrollo de su plan de transición energética, cuyo fin es reducir sus emisiones de C02 y cumplir con la normativa, así como a ser su "principal aliado" tanto al frente del Gobierno de Cantabria como en la mediación con el Ejecutivo central.

Además, ha asegurado que trabajará "mano a mano" con la industria en general para afrontar ese reto "tan complejo" de conjugar la competitividad con el cumplimiento de la normativa medioambiental.

Así lo ha dicho la candidata 'popular' a la Presidencia de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, tras mantener este jueves una reunión con la Dirección y el comité de empresa de la fábrica, a la que ha asistido junto al número dos de la candidatura, Lorenzo Vidal de la Peña; al portavoz del PP, Íñigo Fernández; la presidenta del partido en Torrelavega, María Luisa Peón; y la candidata 'popular' a la Alcaldía de la capital del Besaya, Marta Fernández Teijeiro.

"El PP no solamente respalda el plan de transición energética de Solvay, sino que va a ser su principal aliado tanto al frente del Gobierno de Cantabria como en su interlocución y mediación con el Gobierno de la nación", ha dicho tras considerar que "defender esta emblemática fábrica y su continuidad en Cantabria es defender lo nuestro, es defender Cantabria".

Así, ha dicho que Solvay atraviesa un momento "crucial" y "crítico" porque debe afrontar un "complejo" proceso de transición energética que es "clave" para mantener su competitividad y consolidar el futuro de la planta en Torrelavega, aunque "se complica" una vez que el Gobierno central ha dado luz verde al Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), ahora en fase de alegaciones.

Para hacerle frente, la empresa ha definido un plan para reducir "de manera muy importante sus emisiones de CO2", invirtiendo más de 200 millones de euros y sustituyendo progresivamente el carbón por otros sistemas de alta eficiencia, pero a juicio de los 'populares' "no puede afrontar este proceso en solitario".

Así, Buruaga ha señalado que la fábrica necesita el apoyo de las administraciones en esa transición, a nivel legal y de gestión. "Solvay necesita implicación y trabajo en estrecha colaboración con el Gobierno nacional y regional", ha sentenciado.

Además, ha asegurado que el nivel de vida de Cantabria se construyó sobre estas grandes empresas "centenarias" como Solvay, Sniace, Sidenor, Ferroatlántica, Global Steer Wire o Nestlé, por lo que "el primer mandamiento" de la política industrial de la región tiene que ser cuidar de las empresas que "ya están entre nosotros".

Según ha dicho, hay industria nueva y otra que debe "renovarse, transformarse y modernizarse", y las dos son "vitales" para el futuro de la región, por lo que se ha comprometido a que "nunca faltará el respaldo y la gestión del PP para mantener esas industrias abiertas y viento en popa".

En este sentido, ha criticado la "inacción" y "falta de resultados" en estos cuatro últimos años, ya que a su juicio en esta legislatura el Gobierno ha ido "de fracaso en fracaso" en la política industrial.

"Ha demostrado falta de planificación, de coordinación y de gestión, ha pecado de inacción y cuando ha intervenido ha sido muchas veces mal y tarde" y Solvay "es un ejemplo de ello", ha lamentado.

Por el contrario, ha manifestado que el PP tiene en este aspecto "trayectoria y credibilidad" sí cuenta con un plan industrial para los próximos cuatro años, en el que la transición energética "es clave" y con el que pretende potenciar y modernizar la industria, impulsar su sostenibilidad, apostar por la innovación, acelerar la digitalización, generar un entorno amigo y colaborar "mano a mano" la normativa medioambiental.

Buruaga ha avanzado que en Cantabria esa transición va a tener un "fuerte impacto a nivel económico y social" y tiene que ser "justa y sensible" a las necesidades de la industria, por lo que y ha opinado que haber un compromiso "mucho más claro y mucho más intenso que el que ha existido hasta este momento".