Así, de 76.798 señalamientos en la provincia, 53.067 se celebraron y 23.731 fueron suspendidos, según consta en la memoria del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) del pasado año, consultada por Europa Press, de la que se desprende que Málaga se sitúa, junto a Sevilla y por detrás de Almería -con un 32%- en el mayor porcentaje de aplazamientos de juicios y vistas.

Por jurisdicciones, en la civil y en la de lo contencioso-administrativo se registraron ligeros descensos en las suspensiones de juicios y vistas, con porcentajes del 27 y del 18 por ciento, respectivamente; frente a 28 y 21 por ciento en 2017. En el ámbito penal y el social, los aplazamientos se mantuvieron igual, en 23 y 56 por ciento.

Dentro de la jurisdicción civil, donde se dieron en total 8.800 suspensiones, el porcentaje más elevado fue en los juzgados de Primera Instancia, con 6.036 juicios suspendidos o no celebrados de 20.879 señalamientos. Los de Primera Instancia e Instrucción llegan a un 28 por ciento de aplazamientos, según se recoge en la memoria del TSJA.

En la jurisdicción social, se aplazaron en Málaga más juicios o vistas -8.556- de los que se celebraron -6.588-, de un total de 15.144 señalamientos, lo que supone un 56 por ciento de suspensiones -a nivel andaluz es del 55%-, la mayor parte en los juzgados y en mucho menor medida en la Sala de lo Social del TSJA.

En el ámbito penal, el índice de juicios no celebrados en 2018 se mantiene en el 23 por ciento, con 19.033 celebrados y 5.561 suspendidos de un total de 24.594 señalamientos. La mayoría de aplazamientos se dio en los juzgados de lo Penal, con un 29 por ciento. En lo contencioso, se registró un descenso de 21 a 18 por ciento de suspensiones.

En las secciones civiles de la Audiencia Provincial se suspendieron en 2018 un total de 19 vistas o juicios de un total de 130 señalamientos, lo que supone un 15 por ciento y un aumento respecto al año anterior; mientras que en las penales se registraron 209 de un total de 961, lo que significa un 22 por ciento y un ligero descenso sobre lo registrado en 2017.

Con carácter general, desde el TSJA vuelven a incidir como otros años en que las suspensiones constituyen "una grave disfunción comentada cada año, ya que a la problemática existente con relación al nivel de pendencia, la suspensión del juicio o vista señalada conlleva que el hueco que estaba previsto para ese día no pueda cubrirse con la inclusión de otro señalamiento, con el consiguiente perjuicio para la buena eficiencia del servicio público".