Para Sarasola, se trata del principal monumento de la ciudad y, posiblemente, de la región, a su juicio. Así lo ha destacado, a través de una nota de prensa, tras haber mantenido una reunión con la Asociación de Antiguos Alumnos de La Laboral.

El objetivo de este plan sería establecer los usos que deberían albergar las partes aún vacías del complejo arquitectónico, regular los requisitos a los que han de sujetarse las intervenciones en el mismo y determinar las actividades compatibles tanto con el edificio como con su entorno de protección.

A su modo de ver, esto es más necesario que nunca tras haberse declarado Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de monumento en el año 2016.

El Plan debería incluir y concretar una serie de actuaciones encaminadas a adecentar y mejorar el estado en el que se encuentra buena parte de su entorno de protección, lleno de maleza en algunas partes, así como recuperar la posibilidad de circunvalar a pie todo el perímetro del edificio, según él.

"Algo que en la actualidad es imposible debido a una valla que incomunica los jardines con el entorno del antiguo convento de Las Clarisas, actualmente sede de la RTPA", se ha quejado.

También ha reclamado al Ayuntamiento que inicie cuanto antes la rehabilitación y acondicionamiento de las instalaciones deportivas que les ha sido recientemente cedidas, así como de la casa de las Maquetas, edificación singular dentro del conjunto arquitectónico y que se encuentra en un estado de "completo abandono, rozando la ruina", ha advertido.

Además, ha apuntado a la necesidad de efectuar una mayor promoción turística de edificio, que debido a su tamaño y singularidad constituye uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad y cuyo potencial "no estamos sabiendo aprovechar", ha asegurado.

Por todo ello, ha pedido que no haya más improvisación en los usos e intervenciones que se desarrollen en el mismo, asegurando la recuperación de todo su entorno y prefijando los usos de las zonas que actualmente se encuentran abandonadas.