La policía del estado brasileño de Río de Janeiro mató en 2007 en supuestas confrontaciones a 1.330 personas, un 25 por ciento más que en 2006, según cifras oficiales divulgadas este jueves por las autoridades.

Los datos del Instituto de Seguridad Pública del Estado muestran en comparación con 2006 un aumento en el número de los delitos de "resistencia" a la policía, que es donde se clasifican los "delincuentes" muertos a un ritmo de casi cuatro por día.

Organizaciones defensoras de los derechos humanos acusan a la policía de Río de Janeiro de cometer excesos de autoridad en sus frecuentes incursiones en las favelas de la ciudad y su periferia.

Las acciones contra narcotraficantes dejan numerosas víctimas inocentes, sin contar con supuestos delincuentes armados ejecutados a quema ropa, según casos denunciados por los vecinos de las barriadas pobres y que son investigados por el Ministerio Público.

En contrapartida, en 2007 hubo una reducción del 16,9 por ciento y del 5,7 por ciento, respectivamente, en el decomiso de armas y drogas.

Policías muertos

Por otra parte, los casos de policías muertos fuera del horario de servicio llegaron a 119, aproximadamente uno cada tres días y con un aumento del 26 por ciento respecto a 2006. Otros 32 policías fueron asesinados en acción, frente a los 29 de 2006.