A preguntas de los periodistas, Pola ha explicado que se trata de una consecuencia de la crisis global que afecta al sector de la automoción. Así, ha explicado que el volumen de pedidos de la empresa descendió de forma significativa, lo que les ha llevado a plantear un "ajuste" que se empieza a negociar ahora.

"Plantean un expediente de regulación temporal de aquí al final del ejercicio, diez días por mes; los detalles tendrán que salir de ese proceso de negociación abierto entre empresa y trabajadores", ha indicado.

Pola confía en que la situación sea "circunstancial" y que la empresa le ha transmitido que lo sucedido es una circunstancia vinculada al sector del automóvil en general, en un marco en el que ha habido varios fabricantes de coches que están sufriendo descentos de pedidos.

Una de las claves para que la situación mejore, según Pola, es que la planta tenga "más de un cliente" en amortiguadores y varillas. "En este momento la totalidad de la producción está vinculada a pedidos de Tenneco y una de las claves para el futuro es que diversifique el número de clientes, para que la planta vuelva a una senda productiva", ha declarado el dirigente asturiano.