La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnado de Cantabria, FAPA, ha propuesto regular el calendario escolar de la comunidad por decreto.

Lo ha hecho en las alegaciones que ha presentado a la consulta previa del anteproyecto de orden que modifica la de 23 de junio de 2014, que dicta instrucciones para la implantación del Decreto del mismo año que establece el currículo de la Educación Primaria en Cantabria.

La Consejería abrió el 12 de marzo la consulta pública para la derogación de la orden que

dictó en julio de 2018 para "dar encaje a las jornadas reducidas sin que esto llevase al incumpliendo de las horas lectivas mínimas del alumnado", y FAPA ha presentado alegaciones para modificar la orden de 2014 que regula la implantación del currículo de Primaria y no contemplaba jornadas reducidas.

Dicho plazo finalizaba el pasado martes, por lo que a FAPA le "resulta curioso" que sólo un día después ya se haya anunciado una derogación relativa a este tema, por lo que la federación sospecha que "esa modificación ya está preparada y cerrada" y que sus alegaciones "no serán tenidas en cuenta y posiblemente ni siquiera leídas".

Según FAPA, estos "movimientos" constatan la intención del consejero de Educación, Francisco Fernández Mañanes, de "recortar en 32 horas lectivas" (más de una semana de clase) el calendario escolar del alumnado, "volviendo a situar a Cantabria en el nivel más bajo de las comunidades autónomas".

"Resulta paradójico y de un cinismo absoluto que la eliminación del 'decreto de los recortes' tenga como consecuencia el recortar los derechos del alumnado, pues esta reducción horaria no va a tener su reflejo en una reducción del currículo, lo que llevará a tener elmismo contenido, pero con menos tiempo para su asimilación", ha denunciado.

Por ello, FAPA ha hecho un llamamiento a todos los grupos parlamentarios de Cantabria para instarles a cumplir con la mesa de negociación, y también al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, "para que haga todo lo posible por evitar este ataque alderecho a la educación de nuestros hijos".

ALEGACIONES

La futura norma pretende revertir a la situación previa a la Orden que lo modificó el año pasado, que autorizaba al desarrollo de una jornada reducida "sin concretar en qué medida" y "sin garantizar" el mínimo de 875 horas lectivas anuales, un planteamiento, el de la modificación, "adecuado" según FAPA.

Sin embargo, la federación considera "erróneo" el planteamiento de vincular la nueva norma a la aprobación de la ley 4/2019, de 7 de marzo, para la mejora de las condiciones para el desempeño de la docencia, ya que, subraya en las alegaciones, se trata de las condiciones laborales del personal docente respecto a su propia jornada laboral y la parte lectiva de ésta, "pero no sobre el horario lectivo del alumnado".

Por tanto, la Federación alega que si el objetivo es volver a la redacción original de 2014, está "totalmente de acuerdo", pero muestra su "oposición" si el objetivo es "posibilitar el recorte o reducción de horas lectivas en el cómputo anual por debajo de las 875 horas lectivas como recogía la orden".

Entre las posibles soluciones alternativas, FAPA propone derogar, "sin más", la orden del año pasado, volviendo a la vigencia de la de 2014.

Pero en su opinión, "se podría avanzar" más en la regulación normativa de Cantabria yregular por decreto el calendario escolar, tomando ejemplo de Andalucía

Otra alternativa sería, continúa, incluir en las órdenes de calendario artículos que garantizan un tiempo mínimo de formación, como hacen varias autonomías.

En definitiva, para FAPA, cualquier alternativa que se plantee debe "garantizar el cumplimiento del mínimo de 875 horas lectivas y 175 días lectivos para Educación Primaria y 1.050 horas y 175 días lectivos para Educación Secundaria".

"Aunque también sería deseable que Cantabria no se conformara con el mínimo de días y horas y garantizara incluso más días y horas, como sí lo hacen otras comunidades autónomas, como indicador cuantitativo de mejora de la calidad educativa", señala.

De esta forma, afirma, Cantabria se acercaría a la recomendación de la Unión Europea de aumentar los tiempos de instrucción obligatoria "ya que tiene una relación directa con la calidad educativa".

CALENDARIO

Por otra parte, para FAPA el anuncio de que el calendario escolar del próximo curso se aprobará el martes 9 supone "un desprecio a la ciudadanía, un nuevo ninguneo a las familias y un ataque directo al derecho del alumnado a recibir una educación de calidad".

La negativa de la Junta de Personal Docente a participar en la mesa de negociación delcalendario escolar ha hecho, según la federación, que el consejero "opte por negociar el mismo exclusivamente en la mesa sectorial, desoyendo el mandato del Parlamento de Cantabria", y haciendo "oídos sordos al Ministerio de Educación, al condicionar las horaslectivas del alumnado con la jornada laboral del profesorado".

Para FAPA, "todo parece indicar" que el consejero "ni siquiera va a tener la deferencia de convocar una última 'escenificación de negociación' antes de aprobar el calendario, ya que lo único que le preocupa es poder alcanzar un acuerdo con la Junta de Personal, nada le importa la opinión de las familias ni la del resto de la comunidad educativa".

Algo que, según la federación prueba, que "no se haya dignado" a recibir a FAPA "ni una sola vez" a lo largo del curso pese a haberlo solicitado hasta en cuatro ocasiones por escrito y otras tantas verbalmente.

"Es evidente que el consejero no quiere dar la cara y explicar que todas las medidas que está tomando en este tema van encaminadas a solventar un problema laboral a costa de la educación de nuestros hijos", concluye.