Así lo han detallado el departamento de carreteras del Cabildo de Gran Canaria y la Policía local de la ciudad, que precisaron retenciones en la Avenida Marítima en sentido norte, así como en las carreteras GC-3 y GC-2.

En el último caso se trató de desprendimientos en la GC-2, que supuso el desvío de tráfico a la GC-3, hasta que se pudo terminar la labor de adecuación de la primera, lo que duró algo más de una hora.

En concreto se produjo un corte de carril en el punto kilométrico 13 de la GC-2 dirección Las Palmas de Gran Canaria, a la altura de El Altillo, debido a una barranquera de agua y barro.

También se han tenido que hacer trabajos en el puente de Silva, donde un cable de alumbrado se soltó en su interior y piedas ocupaban una vía, cerrando un carril al tráfico, que tardó unas dos horas en resolverse.

Junto a estas incidencias otros trabajos ya previstos también han dificultado la circulación, como el corte total del túnel de Marzagán, o fuera de la capital los trabajos en la GC-60, el el tramo de Fataga, en San Bartolomé de Tirajana.