El pasado día 22 de junio, en una sucursal bancaria de la localidad de Camarena, se cometio un delito de robo con violencia e intimidación. Los hechos ocurrieron sobre las 12.00 horas cuando en esta entidad se encontraba un cliente y su directora, ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.

El primero de los delincuentes, que iba con el rostro enmascarado con distintos accesorios, accedió a la sucursal excusándose en querer abrir una cuenta en la entidad.

Una vez dentro el segundo llamó al timbre vestido con sombrero y guantes, lo que ya causó sospechas en la directora, por lo que el hombre que estaba dentro les amenazó e intimidó -a la directora y al cliente- con un arma de fuego para que se permitiera el acceso a su complice.

Seguidamente, estos delincuentes condujeron a sus víctimas hasta una habitación y sustrajeron el dinero del mostrador de la caja sin llegar a esperar la apertura de los dispositivos de la caja fuerte como era su objetivo, para salir huyendo en un vehículo que tenían estacionado en una calle perpendicular a este lugar.

La Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Toledo se hizo cargo de la investigación, lo que llevó a los agentes a tomar manifestación a las victimas y los testigos. Igualmente, el Equipo de Policía Judicial de la Guardia civil de Illescas realizó la inspección ocular en la sucursal.

Estas gestiones iniciales llevaron a la Guardia Civil a comprobar que uno de los delincuentes había intentado acceder a la surcursal tres días antes sin que se le permitiera acceder.

El Instituto armado cotejó datos de más de 18.000 vehículos relacionados con el de huída e intercambió información con el Cuerpo Nacional de Policía de Madrid, donde se cometieron hechos similares con posterioridad.

Una vez analizada toda la información obtenida durante estos meses, identificó a los dos autores de este delito, dos hombres de 40 y 44 años de edad recpectivamente, con numerosos antecedentes delictivos y que se encontraban ingresados en dos centros penitenciarios de la provincia de Madrid cumpliendo condena por otros hechos delicitivos.

La Guardia Civil accedió a dichos centro penitenciarios para imputar a estos hombres por los delitos de robo con violencia e intimidación, detención ilegal y tenencia ilícita de armas, realizando la misma este mes de marzo.