Miércoles, 3 de abril, a las 12. Las direcciones de Izquierda Unida y Anticapitalistas, junto al resto de actores que conforman la candidatura Madrid en Pie, han citado a una reunión a Podemos para cerrar un acuerdo de confluencia capaz de evitar en el último minuto la hiperfragmentación en las elecciones a la Comunidad de Madrid. El lugar no puede ser más simbólico: el Teatro del Barrio de Lavapiés, el escenario sobre el que, en 2014, se presentó por primera vez en sociedad el entonces movimiento de Pablo Iglesias. Pese al evidente guiño a la mitología morada, la dirección regional, interina, aún no ha confirmado su asistencia. Fuentes de este medio aseguran que estudiarán la petición.

Con este movimiento, la cúpula de IU en Madrid mantiene su estrategia de mano tendida a sus aliados federales pese al portazo que las bases de la Comunidad dieron la semana pasada a su propuesta de coalición. Pero, sobre todo, el partido intenta sacudirse las acusaciones de haber colocado a la izquierda madrileña al borde de una implosiva escisión fractal, pese a sus intentos, precisamente, por reconstruirla.

En una carta abierta remitida a Podemos y a su candidata, Isa Serra -sensible, en principio, al entendimiento "desde abajo", como explica en una tribuna este lunes en 20MINUTOS-, IU y Anticapitalistas reclaman un encuentro "sin apriorismos y con la voluntad de ceder" para fraguar la papeleta unitaria. "Durante los últimos días, hemos recibido muchas llamadas de activistas y ciudadanas de nuestra región para que hiciéramos un esfuerzo final por conseguir la mayor unidad posible en las próximas elecciones autonómicas", explican.

Sobre la mesa, esa "apelación a la responsabilidad" se traducirá en un acuerdo cerrado alrededor de cuatro únicos puntos: la edición de un programa "de mínimos" con la fusión de las propuestas de ambas partes, el establecimiento de "mecanismos de control" para asegurar que lo firmado se lleva a cabo, la elección de un nombre y, sobre todo, la participación de Podemos en las "primarias conjuntas proporcionales" para configurar toda la lista, número uno incluido.

A esa votación, IU y Anticapitalistas han anunciado hoy en rueda de prensa que se presentarán agrupados bajo el liderazgo de la diputada del Congreso Sol Sánchez, escogida por su propia militancia en octubre. La también coportavoz en Madrid del partido de Alberto Garzón ha pedido "no dejar de intentar" que haya solo una candidatura "lo más amplia posible" que rivalice por la izquierda con Íñigo Errejón y Ángel Gabilondo.

Según ha indicado el diputado autonómico 'anticapi' Raúl Camargo -número tres, tras la exconcejala de Getafe Vanessa Lillo-, el reglamento está diseñado para que Podemos "pueda presentar su lista" entera, bloqueada, sin que las bases tengan capacidad de alterar el orden. La fecha escogida también está supeditada a la voluntad morada: las urnas se abrirán el 4, unas horas después de que el partido haya deshojado la margarita, si bien, ha recordado Camargo, se podrán presentar candidaturas hasta el final del proceso, el domingo a medianoche.

Si finalmente hay pacto, lo previsible es que el nombre de la candidatura establezca un correlato con la que Madrid en Pie traza para franquear las puertas de Cibeles. En la capital, Podemos ha pasado de apoyar sin fisuras la reelección de Manuela Carmena, incluso a costa de su propia desaparición, a hacer gestos hacia el que previsiblemente será su rival, el cesado exedil de Economía, Carlos Sánchez Mato.