Los hechos se produjeron pasadas las dos y media de la pasada madrugada, cuando una patrulla de Protección Ciudadana fue requerida para que se dirigiera a un local, ya que un particular había reconocido en el interior del mismo al varón que le había robado en el mes de diciembre del año pasado.

Los agentes se dirigieron al lugar y, tras contactar con el comunicante, identificaron al sospechoso, según ha informado el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco en un comunicado.

Mientras los ertzainas permanecían en el lugar de los hechos, fueron informados de que en las cercanías se había producido un robo con violencia media hora antes. La descripción física del presunto ladrón coincidía con la del joven que acababan de identificar.

Además, la víctima del robo con violencia había comprobado, mediante una aplicación de geolocalización, que el teléfono móvil que le habían sustraído se encontraba en una dirección cercana.

Ante estos hechos, los agentes efectuaron un registro en el local y, tras localizar el teléfono móvil en los baños, detuvieron al presunto ladrón y agresor, que fue trasladado a dependencias policiales.