El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha empezado este miércoles la jornada como el candidato a la Presidencia que ofreció una coalición de Gobierno al PP después del 28-A y la ha casi terminado como el potencial ministro de Asuntos Exteriores de un Ejecutivo presidido el Pablo Casado si la derecha logra sumar. Para ello, hoy por hoy, también sería necesario contar con Vox.

En realidad, la contraoferta que Riveraha recibido por parte de Casado no se ha hecho esperar tanto como un día entero, sino sólo unas horas desde que la víspera el líder de Cs lanzara la propuesta para formar con el PP un Gobierno de coalición, que presidirá el candidato del partido que haya quedado por delante.

Este miércoles, Casado ha dado por hecho que en esa coalición el presidente sería él y ofreció a Rivera un puesto en su Ejecutivo. "Sería un excelente ministro de Asuntos Exteriores", ha dicho sobre Rivera, de quien ha dicho que lo haría mejor que el actual titular de Exteriores, el socialista Josep Borrell. "Llevaría mucho mejor la política contra las mentiras de México y la actuación de senadores franceses" ha dicho Casado en alusión a los que apoyaron esta semana una declaración contra la "represión" a los líderes del "procés" y fueron desautorizados por el Elíseo.

La propuesta de Casado no ha gustado en Cs, donde dos de sus primeras espadas ha aleccionado al PP con un tono que, a pesar de la mano tendida a los populares, no oculta que, hoy por hoy, son contrincantes políticos.

"Hay que ser un poquito más serio", ha terciado su secretario general, José Manuel Villegas, que ha advertido de que "no es tiempo de ir de sobrados" ni de "repartirse cargos". "España está en una situación de urgencia, en la que necesitamos echar a Sánchez de La Moncloa. Ese es el principal objetivo", ha dicho.

La cabeza de cartel de Cs por Barcelona, Inés Arrimadas, ha defendido la idea de Rivera afeando al PP que "Casado se ha perdido lo que pasa en Europa". Allí, dijo, la tendencia es que los partidos "presentan propuestas distintas con equipos y programas distintos" y la coalición "llega después de las elecciones".

Cs ha insistido en que su propuesta de formar un Gobierno de coalición con el PP en la "emergencia nacional" de sacar a Sánchez, "un peligro público", de La Moncloa. El PP la considera "buena idea", pero también es consciente de que está ante otra estrategia del partido naranja, que si hubiera querido una unión real la hubiera materializado desde la confección de las listas, tal y como le ofreció Casado. De ahí su advertencia de que Rivera "llega tarde".

La oferta de Cs llega después de que el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, mostrara su preferencia por una alianza con los de Rivera antes que con los independentistas. Esta es la coalición que preferirían los votantes socialistas y muchos de los naranjas, según Metroscopia, que indica que más votantes de Rivera se inclinan por la alianza con el PP.

Entretanto, el PSOE y el Gobierno observan desde la barrera unos movimientos a su derecha que consideran evolución lógica de Cs.

Fuentes gubernamentales recordaban este miércoles que ya el año pasado renunció a definirse como socialdemócrata para considerarse liberal y que en la concentración deColón ya pidió la coalición de Gobierno de derecha, aunque más por las bravas.

El líder de Cs ha aparecido este miércoles con un nombre inusual encabezando la lista electoral por Madrid para el 28-A. En lugar del nombre por el que le conoce, Albert, figuraba como Alberto Carlos Rivera, su nombre 'real', con el que fue inscrito por sus padres al nacer.

Desde Cs apuntaron que es un error que ya se ha comunicado a la Junta Electoral Central y que se subsanará sin problema.

Asimismo, la lista del partido naranja por Valencia ha registrado otra errata, en este caso porque se omitó el primer apellido de Toni Cantó, que aparecía como Antonio García del Moral.