Técnicos municipales intervinieron ayer en la desinfectación y desratización de una vivienda de la calle Senador José Vicente Mateo, junto a la plaza de Orán, que estaba plagada en su interior de basuras, cucarachas, excrementos de perro y barras de pan húmedas, habitada por tres hermanos.

Los técnicos se vieron obligados a entrar con mascarillas por el hedor del interior de la casa, que molestaba a los vecinos del inmueble. La intervención municipal se ha llevado a cabo después de que una vecina que vive en el piso de abajo avisara de que le llegaban filtraciones de agua a su casa procedentes de la vivienda de arriba.

La suciedad en el interior de la vivienda era tal que se llenaron tres contenedores tras limpiarla por completo. Los técnicos y fuerzas de seguridad que acudieron al inmueble tuvieron que forzar la puerta de entrada de la vivienda para poder entrar. Los tres hermanos que allí residían habían abandonado el hogar antes de que llegara la Policía.

Ya habían sido apercibidos de una posible multa de hasta 15.000 euros si no limpiaban la vivienda.