En este sentido, y en unas declaraciones recogidas por Europa Press, la alcaldesa ha recordado la existencia de "informes técnicos que desaconsejan dicha bajada del IBI, ya que supondría una merma crítica para las arcas municipales, llevando aparejada un empeoramiento de los servicios públicos, reducción de plantilla y sumiendo a la administración en un plan de ajuste económico". "Izquierda Unida es conocedora de estos informes y sabe que una rebaja fiscal de ese tipo dejaría al Ayuntamiento en una situación de quiebra", asevera.

Hervás ha apuntado además que "acometer una bajada significativa del IBI y devolverlo a los valores de 2010 requiere el saneamiento previo de las cuentas municipales y el equilibrio presupuestario, poniendo fin a la enorme deuda municipal que ha lastrado este mandato merced a los préstamos solicitados por la anterior corporación y la rémora que han supuesto los litigios por el cobro ilegal de las tasas urbanísticas, que ha obligado al Ayuntamiento a pagar unos diez millones de euros desde 2015".

La alcaldesa ha recordado igualmente que su gobierno municipal ya bajó el IBI "un cinco por ciento" y puso en marcha importantes bonificaciones como la reducción de un 25% del IBI a viviendas con placas solares más la reducción del recibo en un dos por ciento para las familias que domiciliaban en el banco el impuesto.