Que los ancianos y niños coman por los ojos. El grupo de investigación en Nutrición y Bromatología de la Universidad de Murcia (UMU) hará encuestas, a partir de abril, para conocer qué prefieren de menú los 150 ancianos acogidos al servicio municipal de comidas a domicilio y 500 niños de las 7 guarderías públicas de Murcia. Quieren que, además de comer sano, les sepan mejor los alimentos.

Lo harán gracias a un convenio firmado entre el Ayuntamiento de Murcia y la UMU. «Sabremos si a igualdad de nutrientes, por ejemplo, es más fácil que un anciano se coma un plato de cocido que uno de lentejas», explicaron fuentes del Servicio Municipal de Sanidad.

Un sabor más agradable

Los investigadores de la UMU también vigilarán en las cocinas donde se elaboran los menús municipales el estado y aspecto de los alimentos. «La fruta y la verdura no pueden tener picaduras y deben tener colores vivos», apunta Gaspar Ros, responsable del grupo de investigación.

«Las comidas para estos colectivos sensibles no deben llevar sal. Todas se deberían aderezar, al menos, con una cucharadita de aceite de oliva, y utilizar especias para que el sabor de los platos sea más agradable», añade.