En ese marco, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha mantenido en la ITB una reunión con Adel El Fakir, el director de la Oficina Nacional de Turismo de Marruecos, para analizar la posibilidad de aumentar los enlaces directos entre Sevilla y el país norteafricano, con especiales miras hacia la ciudad de Casablanca, según ha informado el Ayuntamiento en una nota.

En la actualidad, el aeródromo sevillano de San Pablo está conectado con Rabat, Marrakech, Fez y Tánger a través de la empresa Ryanair. Conforme al Plan Estratégico para la Mejora de la Conectividad Aérea 2018-2020, se han abierto negociaciones en Berlín con la intención de abordar la ciudad de Casablanca por la "importancia" de su aeropuerto tanto para Marruecos como para el tráfico aéreo internacional, en concreto con Royal Air Maroc, la aerolínea nacional del país. En este objetivo, se pretende trabajar en el diseño de productos turísticos concretos entre varias ciudades marroquíes y la de Sevilla, según ha avanzado Espadas.

En cuanto a China, durante el transcurso de la ITB el alcalde ha mantenido un encuentro de trabajo con Li Baochun, el subsecretario de la Federación Mundial de Ciudades Turísticas (WTCF), cuya sede se ubica en Pekín, para avanzar en el ofrecimiento realizado por Sevilla para que esta organización albergue en la capital su centro europeo para reforzar el turismo con china y la inversión empresarial, y todo encuadrado en los actos de la conmemoración del quinto centenario de la primera circunnavegación a la tierra de Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano (2019-2022) y las oportunidades que despierta la nueva Ruta de la Seda.

Espadas también ha mantenido una reunión con Ricardo Martínez, el embajador de España en Alemania, para analizar el mercado alemán tanto desde el punto de vista turístico en España y en Sevilla -en el primer caso, desciende la afluencia en la oferta de sol y playa, mientras que crece en la ciudad de Sevilla por su oferta patrimonial y cultural- como empresarial, y en este marco el regidor hispalense ha ofrecido especialmente el Parque Científico y Tecnológico (PCT) Cartuja como espacio propicio para albergar inversiones germanas.