Las temperaturas máximas estuvieron, en general, por encima de los valores normales, mientras que las temperaturas mínimas se han mantenido en valores más propios de la época, lo que ha hecho que el carácter térmico del mes haya quedado en cálido, evitando que haya sido aún más cálido.

Por influencia de aire de procedencia sur se alcanzaron valores muy elevados de temperaturas máximas, que fueron efemérides de febrero en algunas estaciones no principales, los días 26 y 27. Destacaron Amieva-Campurriondi con 27 grados (máximo de los últimos veinticinco años junto con febrero de 1997), y Mieres-Baiña con 26,3 grados, la más alta para febrero desde que comenzasen las medidas en esta estación hace diez años.

Las temperaturas mínimas registraron valores por debajo de 0 grados durante todo el mes en las zonas altas del Principado, destacando los -7,7 grados del día 3 en Pajares-Valgrande y -7,4 grados en Leitariegos, siendo los primeros días del mes los que presentaron temperaturas mínimas más bajas.

La insolación de este mes de febrero ha estado muy por encima de lo normal, hasta el extremo de ser el febrero más soleado en el aeropuerto de Asturias desde que comenzaron las observaciones en 1969. Si a esto unimos las elevadas temperaturas máximas, el escaso recorrido del viento y la escasez de días de precipitación, nos encontramos con uno de los meses de febrero de tiempo más apacible que se recuerdan. Se registraron unas 233 descargas eléctricas por rayos, todas ellas en los dos primeros días del mes.