El nuevo diseño, más sencillo y seguro, busca potenciar la imagen de Asturias. De hecho, es el mapa del Principado el que aparece resaltado en las nuevas contraetiquetas, frente al modelo anterior en el que aparecía Europa.

La contraetiqueta en verde, con una barra metálica plateada, será para los productos de sidra natural, mientras que la que es negra, con la barra en dorado, es para los espumosos. Las nuevas contraetiquetas introducen además referencias del año de

la cosecha y la numeración de la botella. La contraetiqueta mide cinco centímetros de ancho y 24 milímetros de alto.

Daniel Ruiz ha explicado que con el nuevo diseño han querido buscar una imagen "más ligera, limpia y profesional" en la que Asturias tenga un mayor peso ya que se trata de un producto que no se puede repetir con manzanas de otros territorios.

El diseñador Juan Hernaz ha explicado que la antigua contraetiqueta daba algún problema técnico

en las imprentas y que ha optado por un modelo más moderno. Además ha explicado que la nueva tiene más elementos de seguridad para evitar fraudes.

Cuando han sido preguntados por los periodistas acerca de si se había detectado algún fraude con la antigua contraetiqueta, tanto el gerente de la DOP como María Jesús Aguilar lo han negado. "Es simplemente por prevención, lo mismo que ha pasado con los carnets de identidad, que se han modernizado", ha apuntado. Todos han insistido en la importancia del nuevo distintivo y la seguridad que le dará al consumidor.