Según ha informado el Principado a través de una nota de prensa, en el túnel se instalará un sistema de seguridad que costará cerca de 193.000 euros. También se desarrollará un plan de mejora ambiental, para lo que se destinarán 684.000 euros. Dicho plan, "consistirá en el diseño e implantación de un nuevo método de depuración de emisiones difusas y de efluentes de extinción de fuegos con reciclado de agua industrial", ha precisado Pola.

Estas iniciativas también favorecerán la puesta en marcha de nuevas líneas de investigación en el seno de la fundación ya que "se complementarán las novedosas actuaciones que se están ejecutando desde hace un año", ha agregado el consejero.

Isaac Pola ha informado este lunes en el Ayuntamiento de Siero sobre el proyecto previsto para el túnel, en una reunión en la que han participado también la concejala de Urbanismo, Noelia Macías, la directora general de Minería y Energía, Belarmina Díaz, y Santiago Berjano, del Servicio de Minería del Principado.

La Fundación Barredo desarrolla actualmente trabajos de investigación en software para las patentes de cables, en sistemas de realidad aumentada aplicados a la restauración de espacios afectados por la actividad minera y en la catalogación y gestión de información georreferenciada.

Todas estas actividades se realizan mediante la suscripción de convenios con Tunnel Safety Testing SA (TST-APPPus), la Universidad de Oviedo, el Centro Tecnológico de la Información y la Comunicación (CTIC), Know-How Innovative Solutions y la Fundación Asturiana de la Energía (Faen).

EL TRABAJO DE LA FUNDACIÓN

Desde sus inicios en 2001, la Fundación Barredo ha trabajado en una línea de investigación en cables que ha dado lugar a dos patentes, CableScann y OpenScann, en una línea de simuladores para formación y en diferentes estudios sobre el espacio subterráneo en lo referido a ventilación, transmisión y barreras de contención de emisiones de gas y ventilación e incendios en túneles.

Los principales equipamientos de la entidad son el túnel de ensayos con fuego y el Centro de Experimentación y Ensayos de San Pedro de Anes, unas infraestructuras "únicas" en Europa, comparables al proyecto Tunnel Fire, ubicado en Massachusetts (Estados Unidos).

En este entorno, la fundación realiza pruebas de ventiladores (de rendimiento, resistencia a la temperatura, funcionamiento en carga) y, sobre todo, simulaciones de fuego real en túnel, de gran importancia para garantizar la seguridad de los espacios subterráneos, de los medios de transporte y de las personas.

Así, en una galería de 600 metros de longitud y geometría variable, con 13 estaciones de monitorización y control, se llevan a cabo ensayos con fuego orientados al diseño de I+D+i: la configuración y sistemas de ventilación, resistencia de materiales, equipos de extinción, etcétera.

Además, allí se forman y entrenan también brigadas de emergencia, de rescate, bomberos y personal de mantenimiento, en unas prácticas que son supervisadas la Brigada de Salvamento Minero, que también usa estas instalaciones para su preparación.