"El Gobierno hoy ha dicho que si los independentistas siguen en esa deriva radical no había nada más que hablar", ha manifestado en Solosancho (Ávila), donde ha visitado su polígono industrial.

"El diálogo había que intentarlo porque la crisis territorial, y la división social, merecía un esfuerzo pensando en los millones de catalanes que quieren seguir en España y a los que el Gobierno tiene que defender y responder", ha manifestado.

Según Tudanca, "había que desvincular los presupuestos de un diálogo con Cataluña", y ha añadido que "en todo caso el Gobierno siempre había manifestado y lo la vuelto a hacer, que el diálogo con Cataluña tenía que ser siempre en el marco de la Constitución y de la ley".

A su vez, ha señalado que "el diálogo era la única opción para persuadir a muchos catalanes que se habían echado en brazos del independentismo en los últimos años". "Y no les había echado en brazos del independentismo este Gobierno", ha señalado, para destacar que cuando comenzó a gobernar Mariano Rajoy y el PP "había un 10% de independentistas en Cataluña, y cuando se marchó había un 48%".

Además, ha añadido, que en ese período "se habían producido dos referéndums ilegales y unja declaración unilateral de independencia, y se habían fugado los dirigentes separatistas a otro país".