Así, la organización ha aprovechado el periodo de consulta pública establecido por el Consistorio para presentar sus propuestas solicitando que tenga en cuenta estas alegaciones y que las incorpore al texto de la modificación de la Ordenanza por considerarlas de interés para todos los usuarios.

En primer lugar, OCU valora positivamente la creación de una nueva normativa municipal, pero considera "conveniente" que esta regulación se establezca a nivel nacional, especialmente en lo referente a la clasificación de los vehículos.

Según ha precisado la OCU en un comunicado, es probable que, en breve, la Dirección General de Tráfico (DGT) modifique los Reglamentos de Circulación y Vehículos para incluir los nuevos medios de transporte, lo que puede provocar que las iniciativas locales queden obsoletas, "generando mayor confusión en los usuarios, sobre todo teniendo en cuenta que ya se pueden encontrar marcos regulatorios diferentes en cada municipio", algo que la organización considera "irracional jurídica y funcionalmente".

En segundo lugar, al OCU cree que la nueva normativa debe "acotar claramente" las categorías de vehículos que podrán tener acceso al uso del carril bici, así como la velocidad máxima que podrán alcanzar los motores -limitada a 30 kilómetros por hora sin menoscabo de otros límites inferiores que deban establecerse para la circulación en el carril bici-.

Igualmente, la Organización de Consumidores y Usuarios cree que este carril debe seguir siendo prioritario para la bicicleta no motorizada, y que debe hacerse compatible con el uso de vehículos motorizados dentro de un marco que regule una velocidad máxima que no debería superar la ya establecida de 15 km/h con carácter general y diez km/h en las zonas compartidas con el tránsito peatonal.

Por otro lado, ha pedido que se cree un registro municipal que permita la matriculación de este tipo de vehículos para que puedan ser identificados y que esta matriculación sea obligatoria. Además, pide que sea un requisito obligatorio para la inscripción y legal circulación de estos vehículos disponer de un seguro contra accidentes y, en todo caso, ante eventuales daños a terceros con coberturas análogas a las del seguro obligatorio de circulación de vehículos a motor.

Por último, OCU ha pedido al Ayuntamiento de Sevilla que prohíba la circulación de los vehículos motorizados definidos en la ordenanza por zonas exclusivamente peatonales, limitando los horarios de uso en zonas compartidas por bicicletas y peatones en función de fechas, horario y afluencia de público.