Según las pesquisas de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal, dirigidas por el juez de Marbella Oscar Pérez, la operación de desembarco de Roca en el club fue diseñada desde dos despachos de abogados, uno de ellos ubicado en Madrid, el gabinete jurídico Sánchez Zubizarreta, y otro con sede en Sevilla. Este segundo bufete defendía los intereses del presidente del Xerez en aquella época, José María Gil Silgado.

El magistrado Oscar Pérez ha acordado medidas procesales contra el citado Gil Silgado, el abogado que representó sus intereses en la operación y dos empresarios que ya estaban imputados en la 'Operación Malaya'. Otras personas, también afectadas por las medidas judiciales, habrían actaudo como 'testaferros' en la operación.

La Policía, según las fuentes consultadas, ha podido detallar el procedimiento utilizado por Roca para hacerse con la mitad del Xerez y ha determinado el nombre de las sociedades "instrumentales" que se involucraron en el mismo, Oven Five SL y Jovibel 2000 SL, mediante las cuales se habría canalizado la propiedad del accionariado del XEREZ SAD y de los cuantiosos derechos de explotación asociados al equipo.

Los dos empresarios cuya actuación ha sido investigada, habrían coadyuvado tanto a la adquisición original de la participación por Roca y Gil Silgado, como a la posterior financiación de la ampliación de capital que con motivo de la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas se hubo de acometer por el Xerez.

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