La polémica confesión que realizó Liam Neeson durante una entrevista ha levantado una polvareda tremenda al comentar que quiso "matar a un negro" después de que una mujer de su círculo sufriera una violación.

Las declaraciones se produjeron en un encuentro con los medios de comunicación para promocionar Cold Pursuit, una película en la que interpreta a un padre que busca a los asesinos de su hijo.

El actor se ha visto obligado a suavizar sus palabras en el programa Good Morning America. "Estábamos en la rueda de prensa y salió el tema de la venganza, algo que está muy presente en la película", comenzó Neeson.

"La periodista me preguntó cómo había conectado con la sed de veganza de mi personaje y recordé un incidente que sucedió hace casi 40 años cuando una amiga mía fue brutalmente violada por una persona negra", prosigue el protagonista de Taken.

En el momento en que se produjeron los hechos, Neeson estaba fuera del país, pero cuando regresó su amiga le contó lo sucedido. "Nunca antes había sentido este sentimiento y salí deliberadamente a la calle buscando que me atacasen para desencadenar la violencia física", dice Neeson.

"Lo hice tal vez cuatro o cinco veces hasta que me contuve, y realmente me sorprendió este impulso inicial que tuve. Me sobresalté y me dolió", añade.

Por lo visto, después de aquello Neeson buscó la ayuda de un sacerdote y de varios buenos amigos. "No soy racista", insistió el actor. "Esto fue hace casi 40 años. Me crié en Irlanda del Norte... había una guerra en curso, y tenía conocidos que estaban involucrados en los problemas, en la intolerancia. Crecí rodeado de eso y era parte de mi vida".

No obstante, el presentador del espacio matinal le argumentó que "un hombre negro inocente podría haber sido asesinado o herido" por su culpa. "Yo también podría haber resultado herido", se defendió Neeson.

La estrella explicó que no solo le preguntó a su amiga por la raza del atacante. "Si ella me hubiese dicho que el violador era irlandés, escocés, un lituano... habría tenido la misma reacción", argumentó. Y agregó: "Trataba de mostrar honor y defender a mi querida amiga de esta manera medieval horrible".

Sin embargo, Neeson confesó que hubiese recurrido a la violencia de haber tenido la oportunidad. "Todos pretendemos ser políticamente correctos. En este país, a veces simplemente rascas la superficie y descubres que está ahí el racismo y la intolerancia".

El conductor de Good Morning America le insistió a la estrella que "debía entender el dolor de una persona negra al escuchar sus declaraciones". En ese momento, "a pesar de que fue hace casi 40 años, no lo pensé", respondió Neeson. "Todas esas cosas me sorprendieron. Fue un odio primitivo que me sacudió: La violencia engendra violencia. El fanatismo engendra fanatismo", añadió.

Llegados a este punto, Neeson también comentó que durante el rodaje de La Lista de Schindler en Polonia experimentó fanatismo cuando escuchaba que los taxistas hacían comentarios antisemitas y veía esvásticas en las paredes de camino al set.

En la siguiente entrevista matinal, Neeson repitió practicamente lo mismo, pero limpió un poco más su imagen. Cuando se dirigía al escenario de Live with Kelly and Ryan, el actor fue abrazando a miembros del público que eran de raza negra.

"Siento que tenemos que ser honestos. Crecí en Irlanda del Norte en una sociedad donde había mucha intolerancia entre protestantes y católicos y estoy tan harto de eso", dijo.

El presentador Piers Morgan también ha criticado en Good Morning Britain los comentarios de Liam Neeson a quien comparó con un miembro de Ku Klux Klan y calificó sus palabras como "la pura personificación del racismo".

"Es una estrella importante de cine que quiere saber de inmediato el color de alguien que violó a su amiga. Una vez que descubre que la persona era negra sale armado con una porra durante una semana. No es un momento de locura: es toda una semana, buscando a cualquier persona negra que pudiera cabrearlo para matarlo", reflexiona Morgan.

"Como una persona negra le ha hecho algo malo a mi amiga, voy a matar a cualquier negro que encuentre. ¡Eso es racismo! Eso del Ku Klux Klan", sentencia el presentador.