En su denuncia, el sindicalista relata que hace dos semanas el Consistorio contrató a dos trabajadoras por seis meses con la categoría de auxiliares administrativos para trabajos en dicha intervención, si bien advierte de que "carecen de mesas y sillas, así como de ordenador para realizar su trabajo".

Según expone, las empleadas se han tenido que ubicar conjuntamente en la mesa de otras dos empleadas, "compartiendo espacio entre ellas", a lo que añade que "en la misma planta existen mesas libres, pero son de Recaudación Municipal y entre las distintas jefaturas no se ponen de acuerdo para dejar que se ocupe una mesa libre".

Tras apuntar que desde la Delegación de Recursos Humanos se ha prometido una solución, Moro lamenta que el Ayuntamiento "no da los medios necesarios para hacer efectivo el trabajo", motivo por el que pide a la Inspección una sanción conforme a la legislación vigente.