La asociación de vecinos de la Sagrada Familia de Barcelona ha presentado alegaciones contra el acuerdo entre el templo y el Ayuntamiento de la ciudad, que implicaba una propuesta para modificar el Plan General Metropolitano (MPGM) y crear una Plan Especial Urbanístico Integral (Peui) con el que los vecinos no están de acuerdo.

En rueda de prensa este lunes, el encargado de urbanismo de la asociación, Joan Itxaso, ha criticado que el acuerdo no resuelva cómo se terminará la fachada de la Glòria -el templo quiere una escalinata en la calle Mallorca que afecta a 3.000 personas de dos manzanas-, y ha avanzado que los vecinos se movilizarán cada tercer sábado de mes desde el 16 de febrero hasta mayo.

Itxaso ha asegurado que entienden que la Sagrada Família se quiera ampliar, pero ha apuntado que los vecinos también tienen sus "límites", y ha pedido al Ayuntamiento que inicie un proceso de debate, ya que el acuerdo se ha cerrado sin participación vecinal, según él.

"Todos los edificios que están al lado del templo se han hecho legalmente y el único que no se hizo de manera legal es el templo", ha apuntado el portavoz, que ha asegurado que no están en contra de que el templo se termine si se hace de manera correcta.

Además, Itxaso ha criticado la falta de interés general para motivar a MPGM: "No vemos que invadir una parte de la vía pública ampliando el ámbito del equipamiento de titularidad privada pueda tener ningún interés general. Solo puede responder a intereses privados".

Con todo, la asociación considera que la modificación del PGM sigue la estrategia de abordar el problema por partes, hecho que permitiría ir consolidando volúmenes y que las obras sigan adelante "a trozos", sin que se aborde la totalidad del proyecto, que es lo que piden los vecinos, así como su encaje dentro del barrio.

Una vecina afectada por la posible ampliación del templo, Carme Anta, ha exigido al consistorio que termine con el sufrimiento que ve en el barrio, y ha criticado que no haya habido ningún dirigente político "con la valentía de obligar al templo a hablar con los afectados".

Asimismo, la asociación ha asegurado que también han presentado alegaciones contra el acuerdo el Col·legi d'Arquitectes de Catalunya, el exconcejal de Urbanismo Ramon García-Bragado (PSC) y una organización juvenil afectada de la calle Provença, además de otra alegación de la cual desconocen la procedencia.

El Ayuntamiento y la Junta Constructora de la Sagrada Familia presentaron en octubre un acuerdo que prevé que el templo aporte en diez años 36 millones de euros para mejorar la movilidad y el urbanismo de su entorno, y que el Ayuntamiento tramite el plan especial que permitirá que el templo tenga licencia de obras.