La huelga indefinida de estos días convocada por los taxistas en Madrid y Barcelona reclamando una regulación para los vehículos de transporte con conductor (VTC) ha generado un enorme debate en la sociedad española por la repercusión social y económica que tiene el sector.

Según un sondeo realizado por Metroscopia para 20minutos, entre los españoles hay división de opiniones sobre si las asociaciones del taxi han tenido motivos para convocar los paros en las dos principales ciudades de nuestro país, aunque este colectivo recibe más apoyo y comprensión para sus reivindicaciones por parte de votantes de los partidos de izquierda, como PSOE y Unidos Podemos, que de votantes y potenciales votantes de formaciones de derecha, como PP, Ciudadanos y Vox.

En concreto, el 47% de los españoles considera que los taxistas no tienen motivos para convocar la huelga, frente al 41% que opina que sus reivindicaciones son legítimas. Hay un 8% que ha declarado que desconoce los argumentos para convocar la huelga. El 4% restante no sabe o no contesta.

En lo que respecta a su opinión en función de su orientación política, los votantes de izquierda apoyan más la decisión de los taxistas. Los que más aseguran que los conductores de taxi tienen motivos para realizar los paros son las personas que se declaran más cercanas a Unidos Podemos.

El 59% de los votantes de la formación que encabeza Pablo Iglesias está con el taxi, frente al 31% que se muestra contrario. Estos datos concuerdan con el apoyo que el partido le ha dado al sector.

De hecho, el pasado miércoles, su portavoz en el Congreso, Irene Montero, defendió a los taxistas frente a las VTC, a las que se refirió como "buitres financieros" que acumulan licencias, en referencia a las multinacionales Uber y Cabify, que dominan el negocio.

No es mayoritario el apoyo entre los partidarios del PSOE, aunque su porcentaje es mayor que el de cualquier partido de derechas. Así, el 40% de los socialistas cree que los taxistas sí tienen razones para ir a la huelga, mientras que el 45% piensa que no. En este asunto, el Gobierno de Pedro Sánchez se ha ofrecido a mediar siempre dejando claro que la competencia para regular el transporte urbano es local, como manifestó el ministro de Fomento, José Luis Ábalos.

Por su parte, entre los votantes y potenciales votantes de los partidos ubicados a la derecha del arco ideológico es mayoritaria la opinión de que el sector del taxi no tiene motivos para convocar los paros. El mayor porcentaje en contra llega de las personas que confían su voto al Partido Popular: lo cree así el 63%, frente al 32%.

Precisamente, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha apelado a la libertad de los madrileños para elegir medio de transporte para no ceder ante todas las pretensiones de los taxistas. "No estoy dispuesto a legislar para acabar con el sector de las VTC", ha afirmado el dirigente popular sobre el tiempo mínimo de precontratación que quieren incluir en la ley los taxistas madrileños y que sí han logrado los de Barcelona en su negociación con el Govern.

Por detrás de los del PP, son los potenciales votantes de Vox los que menos entienden las causas de las movilizaciones: el 61% dice que no, frente al 31% que dice sí. Desde la formación de Santiago Abascal han apostado por una liberalización del sector del taxi compensando primero económicamente a los taxistas.

De los votantes de Ciudadanos, por otra parte, el 57% opina que el sector del taxi no tiene razones de peso para protestar contra las VTC, frente al 37% que difiere. Su líder nacional, Albert Rivera, también es partidario de la libertad de elección. "Formo parte de esos locos que creen que los ciudadanos pueden elegir cómo comprar, cómo consumir cultura o cómo transportarse", ha declarado.

Los resultados de la encuesta de Metroscopia para este diario también reflejan que los españoles están siguiendo muy de cerca las informaciones sobre la huelga indefinida de los taxistas y su repercusión a pesar de que los paros solo se han producido en Madrid y Barcelona.

El dato que deja clara esta afirmación es que el 88% ha ofrecido su opinión respecto al conflicto aunque no afectase a su día a día al no residir en ninguna de esas dos ciudades.