Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, los jóvenes, al ver el control que la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Granada había establecido a la altura del kilómetro 205 de la A-92, durante la madrugada del pasado 15 de enero de 2019, arrojaron una mochila por la ventanilla del coche en el que viajaban.

De este modo, cuando los agentes identificaron a los cuatro jóvenes y registraron el vehículo, no encontraron nada, "a pesar del nerviosismo aparente que todos ellos mostraban".

No obstante, los agentes habían visto que este coche había realizado una maniobra extraña unos 300 metros antes de llegar al punto de identificación. Mientras unos identificaban a los cuatro ocupantes del vehículo, otros se habían acercado hasta el lugar en el que el coche "se había movido de manera extraña y encontraron en el arcén una mochila que contenía 70 pastillas de hachís que pesaron 7,3 kilos".

Sospechando que sus propietarios volverían a por el hachís cuando se sintieran seguros, decidió "dejar la mochila donde estaba", y "retirar el control", con una patrulla vigilando el lugar hasta que alguien acudiera a recogerla.

Al rato apareció nuevamente el coche de estos jóvenes. Uno de ellos se bajó del vehículo y se puso a buscar la mochila por el arcén. Justo cuando la encontró y la recogió la Guardia Civil, irrumpió en el lugar y detuvo a este joven y a los otros tres por la presunta comisión de un delito contra la salud pública por tráfico de droga.