Condenado a seis meses de prisión por dar a otro un puñetazo y provocarle la pérdida de dos dientes que se tragó

  • Además, el acusado tendrá que pagar 1.919 euros por las lesiones y sufragar el coste de la reparación dental.
El acusado, de pie, durante el juicio. 9-1-2019.
El acusado, de pie, durante el juicio. 9-1-2019.
Europa Press
El acusado, de pie, durante el juicio. 9-1-2019.

El joven Daniel H.G, vecino de Bolaños de Campos (Valladolid), ha sido condenado a una pena de seis meses de prisión por delito de lesiones sobre otro joven, David R.S, a quien en junio de 2017, en plenas fiestas patronales de Villalón, propinó un puñetazo en el rostro que provocó la pérdida de dos dientes que la víctima incluso se tragó.

Frente al año y nueve meses de prisión y los cuatro años solicitados por el Ministerio Fiscal y la acusación particular, respectivamente, la Audiencia de Valladolid ha impuesto finalmente al citado joven seis meses de prisión-por un delito de lesiones, sin la agravante de deformidad-y el pago, en concepto de responsabilidad civil, de 1.919 euros por las lesiones y de otra cantidad, a decidir en ejecución de sentencia, para sufragar el coste de la reparación dental, según informaron fuentes jurídicas.

En su fallo, el tribunal considera probado que el día de los hechos, a primera hora de la mañana del día 25 de junio de 2017, el condenado y la víctima coincidieron en una peña de Villalón donde el primero, al ver que el segundo se encontraba conversando con una joven con la que al menos mantenía una relación de amistad, le propinó un puñetazo en la cara que le provocó las citadas lesiones en la boca.

Durante el juicio, el ahora condenado, de 23 años, sin éxito, alegó que en ningún momento trató de agredir a David, al que no conocía de nada, y explicó que se limitó a tratar de apartarle cuando éste le llamó "muerto de hambre" y, con una botella de whisky en una mano, se abalanzó sobre él acusándole de haberle robado la cartera.

"No le había visto nunca. Estaba muy patoso y borracho y ya había estado molestando a la gente de la peña", aseguró Daniel, quien rechazó de plano la versión de que su reacción fuera a causa de los supuestos celos de ver a su novia hablando con otro. De hecho, mantuvo que por aquellas fechas no mantenían relación alguna, pese a que un amigo del procesado confirmara en el juicio dicho noviazgo.

Otros testigos, vecinos del pueblo, que aquella mañana se encontraban en la peña donde se produjo el incidente respondieron con vaguedades y sin aportar detalles de cómo se produjeron los hechos y el motivo de los mismos.

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