Los martes, con 50.000 visitas previstas, y los lunes (52.000) serán los días más tranquilos en el meandro de Ranillas. Por el contrario, el recinto estará a tope los sábados, con 101.000 entradas previstas, y los domingos (83.000).

Elegir bien la hora puede ahorrar al visitante largas esperas a las puertas de la Expo. El acceso al recinto, además, estará condicionado  por el número de visitantes que haya en el interior. Así, en el momento en el que se alcance la ocupación máxima, se impedirá la entrada hasta que vuelva a haber sitio para nuevos visitantes.

Está previsto que se complete el aforo máximo del recinto todos los días alrededor de las 21 horas. Las franjas más críticas para entrar serán, por su parte, entre las 10 y las 13 h, cuando se incorpore la gente que quiere pasar la jornada entera en la muestra, y de 20 a 22 h. En este último caso se juntarán los titulares de los abonos de temporada nocturno y quienes acudan a ver los grandes espectáculos de la Expo.

Visitas escalonadas

Según las previsiones, por Ranillas pasarán unas 68.000 visitas de media cada día entre semana y 96.000 los fines de semana. Aun así, la afluencia de público se hará de manera escalonada y la última semana de la muestra se espera alcanzar el récord, con 836.357 visitas.

Los primeros días también serán fuertes, por la curiosidad que despierta el evento y la ansiedad de las miles de personas que tienen ya su entrada anticipada, y se prevén 148.817 visitas el primer fin de semana y 385.856 del 16 al 22 de junio.

La asistencia caerá a partir de ese momento, hasta la segunda semana de julio. Para esa fecha se espera alcanzar las 554.417 visitas, que irán aumentando progresivamente hasta el final de la muestra.

Espacios para visitar

Obras de arte: El pabellón de la Santa Sede en la Expo mostrará hasta 40 obras de arte, parte de ellas de los Museos Vaticanos.

Torre del Agua: Ya se han puesto los parasoles y se está empezando a montar toda la expografía de su interior.