Así lo han confirmado desde el comité de empresa a los medios en la madrugada de este sábado. Los trabajadores están llamados a la huelga todos los martes y jueves a partir del martes 22 de enero, "hasta que la dirección de la empresa no se avenga a aceptar sus reivindicaciones".

Ambas partes llevan protagonizando un conflicto desde hace semanas, al no lograr llegar a un acuerdo en la negociación abierta en el Servicio asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec). La empresa insiste en afirmar que los trabajadores rechazan el nuevo sistema de control de alcoholemia instalado en los autobuses, mientras que los trabajadores reivindican mejoras laborales en materia salarial, de conciliación, de descansos o de higiene en las instalaciones de la empresa.