Salir a trabajar en A Coruña, si se va en coche, es una odisea. De media, los coruñeses pierden casi una hora en acudir a su puesto de trabajo, prácticamente el mismo tiempo que se invierte en recorrer los 50 km que separan la ciudad herculina de Ferrol si no se usa la autopista. Y la culpa es de los atascos, que cada día laboral sufren más de 100.000 vecinos.

Un mapa de los puntos negros realizado barrio a barrio con la ayuda de los vecinos lo demuestra. Desde el Agra a Matogrande, pasando por El Ensanche y Monelos, no hay zona que en hora punta no registre retenciones, que en algunos casos superan el kilómetro.

Ronda de Outeiro, Juan Flórez, avenida de Arteixo y Las Pajaritas son los puntos más conflictivos. «Como mínimo, media hora para ir al trabajo no te la quita nadie», dicen resignados desde la calle Barcelona.

En A Grela y Pocomaco lo peor llega a las 9.00 h, y en el centro es al mediodía y a partir de las 19.00 h.

A pesar de las retenciones, el 53% de los coruñeses elige su coche antes que el bus o ir a pie, según un estudio de la Universidad. Para solucionar los embotellamientos, la Concejalía de Tráfico hará un Plan de Movilidad que cambiará giros y direcciones de calles para agilizar la circulación. Deberá estar listo este año.

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