Obras del Louvre, Coimbra y Buenos Aires forman parte de las 144 piezas de la exposición 'Panteones Reales de Aragón'

  • La exposición 'Panteones Reales de Aragón' recorre la historia de creación del Reino y su transformación en Corona a través de 144 piezas, entre las que se encuentra un alabastro policromado del sepulcro de Fernando I llegado desde el Museo del Louvre de París, una tabla de la Virgen que se conserva o en el Museo Enrique Larreta de Buenos Aires (Argentina) y un collar de oro y piedras preciosas de Santa Isabel de Portugal y su escudo de armas, del Museo Nacional Machado de Castro de Coimbra.
Obra de la exposición “Panteones Reales de Aragón”
Obra de la exposición “Panteones Reales de Aragón”
GOBIERNO DE ARAGÓN
Obra de la exposición “Panteones Reales de Aragón”

La muestra se ha inaugurado este jueves, 20 de diciembre, y se puede visitar hasta el 17 de marzo de 2019, en la Sala de la Corona de Aragón del Edificio Pignatelli de Zaragoza y con entrada gratuita. El acceso se realiza por la puerta lateral de la parte de atrás del edificio, la más próxima a la plaza de Toros, en la calle Vicente Gómez Salvo.

La exposición realiza un recorrido cronológico y espacial por la historia del Reino y la Corona de Aragón mediante piezas pertenecientes o vinculadas con los monasterios que fueron elegidos por los integrantes del linaje de la Casa de Aragón para ser enterrados, comenzando por San Juan de la Peña y llegando hasta Poblet y Santes Creus, en Tarragona.

Además, se hace referencia a figuras que fueron sepultadas fuera de este territorio, como Fernando el Católico, que lo fue en Granada, o Santa Isabel de Portugal y Catalina de Aragón, fruto de alianzas estratégicas con otras potencias europeas del momento o por la unión de las dos grandes coronas de la península.

La muestra reúne piezas de una treintena de instituciones aragonesas, nacionales e internacionales. Además de las ya señaladas, se pueden contemplar los testamentos de Fernando el Católico de 26 de abril de 1515 y del 22 de enero de 1516, ambos son pergaminos que proceden de la Fundación Casa de Alba.

PIEZA NO VISTA EN ESPAÑA

La comisaria de la exposición, Marisancho Menjón, ha explicado en la presentación de la exposición que el alabastro policromado del sepulcro de Fernando I del Museo del Louvre de París, es una pieza "conocida, pero no había venido a ser expuesta" y su origen es el Monasterio de Poblet.

La muestra la exhibe en un espacio dedicado a los funerales del rey, donde se explican los rituales y celebraciones. Precisamente, este alabastro "muestra el ritual en el que los caballeros mostraban su luto", una ceremonia funeraria llamada "correr las armas".

En esta área de la exposición hay al fondo de la sala un cuadro de Ignacio Pinazo que representa los últimos momentos de Jaime I el Conquistador, en el momento que entrega la espada a su hijo Pedro, que será su sucesor, y que "resume el momento crítico que supone la sucesión para un reino, aunque esté asegurada". Es una pieza del Museo del Prado.

La comisaria también se ha referido a la grabación para esta exposición por parte de la Schola Cantorum Paradisi Portae de una pieza musical de la liturgia mozárabe que se cantaba cuando se celebraba a los difuntos en los primeros tiempo del Monasterio de San Juan de la Peña.

LEJOS DE CASA

Marisancho Menjón ha destacado también el espacio dedicado a las figuras del linaje de los Aragón enterrados lejos de este territorio y se ha referido al collar de Santa Isabel de Portugal, está datado en el siglo VI y es de oro sobre piezas originales del siglo XIV, mientras que el escudo de armas es de madera tallada y policromada.

Asimismo, ha mencionado una pieza curiosa que se puede ver, los calcos de la lápida de la tumba de Catalina de Aragón realizados en 1924 por el embajador de España en Londres y enviados a la Real Academia de la Historia, una "figura muy popular en Inglaterra", que fue la que "impulso a Enrique VIII a abandonar la Iglesia católica y fundar la Iglesia anglicana porque ella nunca renunció a ser reina de Inglaterra".

También se muestran los dos testamentos de Fernando el Católico y un cuadro copia del original de Juana la Loca, "con una mirada de dolor y extravío ante el féretro de su esposo", quien fue "la última mujer que mantuvo los derechos del linaje de la casa aragonesa", ha detallado Menjón.

SIJENA

La comisaria también ha explicado que la 'Virgen con niño entronizada, ángeles y donante religiosa' era la tabla central del retablo de la Madre de Dios del Monasterio de Sijena, del siglo XV, si bien se conserva en el Museo de Arte Español Enrique Larreta de Buenos Aires, después de que se hubiera perdido su memoria al ser llevada a América y que fue identificada "hace unos años".

Esta pieza se puede ver en el espacio dedicado al Monasterio de Sijena, panteón real

que alojó los restos de su reina fundadora, Sancha, y del monarca derrotado y muerto en Muret, Pedro II.

En este apartado de la muestra también se puede ver una tabla del retablo mayor y otra que procede posiblemente del Retablo de San Juan, ambas obras se encuentran habitualmente en el Museo de Huesca. La comisaria también ha señalado como piezas destacadas de este espacio el sepulcro de María Ximénez Cornel, condesa de Barcelhos, una obra de temple sobre tabla.

OTRAS OBRAS

La comisaria se ha referido a otras obras, como una reproducción del sarcófago de Doña Sancha, "una de las joyas de la escultura románica española, y dos capitales románicos "con una talla fantástica", que se pueden contemplar en el espacio dedicado a Santa Cruz de la Serós.

En el ámbito del Monasterio de San Victorián hay piezas relacionadas con este abad, en concreto, un relicario, una mitra, "pieza textil del siglo XXI de gran belleza" y una tabla del santo que actualmente está en la catedral de Barbastro, pero que procedía de este cenobio de la provincia de Huesca.

El castillo-monasterio de Montearagón es otro de los lugares que se recorren en la exposición, donde se puede ver el retratado de Alfonso I el Batallador realizado por Francisco Padrilla, así como relicarios, orfebrería, documentación y códices, mientras que el espacio destinado a San Pedro Viejo, se puede ver una talla en piedra policromada de San Pedro,

una reproducción del sepulcro de Ramiro II y un Misal Oscense Siglo XIII.

En referencia a la catedral de Barcelona, en cuya catedral quiso que reposaran sus restos la reina Petronila, con una reproducción del sarcófago romano de la caza del león, donde fue enterrada.

Del ámbito centrado en los monasterios de Poblet y Santes Creus, ambos ubicados en la provincia de Tarragona, la comisaria ha señalado fueron grandes panteones góticos de la época de la Corona de Aragón, de los que se exigen fragmento de las tumbas reales del panteón de Poblet, el cuadro 'Don Pedro III el Grande en el collado de las Panizas', de Mariano Barbasán, entre otras piezas.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento