BIO

Tiene 47 años y dos hijas. Es alergóloga pediatra en un hospital cubano. Colabora con el Movimiento Sin Tierra

El pueblo cubano ha recibido con tranquilidad la retirada política de Fidel Castro, tras 49 años en el poder. Un día después del anuncio de su adiós, 20 minutos entrevistó ayer a

Fidel lo deja. ¿Y ahora qué?, ¿habrá cambios en Cuba?

No, seguimos hacia adelante. La Asamblea Nacional acaba de ser elegida y el 24 de febrero decidirá quién va a ser el presidente de Cuba. No va a haber ningún cambio, la sociedad socialista fue elegida por el 95% de la población.

Es decir, que seguirá una dictadura en Cuba.

¿Tú has visto algún dictador que se preocupe por la cultura de su pueblo, que aumente el nivel de salud de su pueblo y que exporte solidaridad? En Cuba se pueden tener opiniones diferentes, pero la verdad es una y no la puedes modificar. No puedes hablar de una dictadura cuando hay libertad de pensamiento, cuando hay una cultura que te permite ser libre. Un pueblo sólo es libre cuando es culto. El pueblo español, por ejemplo, ¿cómo puede sentirse libre cuando te dicen por televisión lo que tienes que comer? Cuando eres culto y puedes elegir, te sientes libre.

Pero en Cuba no se puede elegir en unas elecciones.

En Cuba el pueblo eligió al Gobierno, sin partidos que valgan y que se digan mentiras y groserías unos a otros. Nuestro pueblo eligió el socialismo, donde se demostró el poder del pueblo.

La relación con España no pasa por su mejor momento.

Sí, son relaciones frías y distantes, aunque respetuosas. Son mejores las relaciones con los empresarios, pero no con el Estado español.

¿Qué se va a encontrar el lector en el libro de su madre, Evocación, mi vida al lado del Che?

Cuando leí por primera vez el libro le dije a mi mamá que era un regalo para el pueblo cubano. Es una historia de amor, escrita de una manera muy simple y de una gran ternura. Es la historia de una mujer humilde del pueblo cubano, muy valiente y muy firme en sus convicciones.

¿Cuántos Ché se pueden descubrir en el libro?

Siempre hay un único hombre, descrito por la mirada de una mujer enamorada que sirve para conocer más íntimamente al hombre del que se enamoró. El Che Guevara era un hombre que sabía amar, la virtud más linda del ser humano. Mi papá amaba intensamente y hacía sentir ese amor a veces sin palabras, sólo con gestos.

Cómo se enteró de la muerte de su padre?

Yo tenía casi siete años. Fidel, al que llamábamos tío, me mandó buscar a mí y a mi hermana mayor y nos dijo que si un hombre muere en combate y muere como él quiere, no debemos llorar por él. Fidel ya nos estaba preparando para una noticia que aún no se había confirmado en Cuba.