Así lo ha manifestado la subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, durante una visita al banco de alimentos Bancosol, perteneciente a la Federación Española de Bancos de Alimentos (Fesbal), organización asociada de distribución en este programa junto a Cruz Roja Española.

Gámez ha explicado en que estas dos plataformas "distribuyen los alimentos a través de 150 asociaciones y organismos de toda la provincia, que atienden a más de 52.000 personas en situación de dependencia social o económica".

La subdelegada del Gobierno en Málaga ha visitado este lunes el centro de almacenamiento de Bancosol en Málaga junto a su presidente, Joaquín Jiménez, quien ha resaltado la ayuda que representa este programa del FEGA. Estos recursos suponen alrededor del 30 por ciento de los alimentos que distribuye esta organización en la provincia.

El Programa 2018 se desarrolla en tres fases de suministro. La primera comenzó en mayo de este año, con algo más de 1.000 toneladas de alimentos, y la segunda arrancó en octubre, mes desde el que se han repartido gratuitamente 1,45 millones de kilos de alimentos en la provincia de Málaga con un valor económico de 1,34 millones de euros.

La tercera fase se llevará a cabo a partir del próximo febrero y está prevista la distribución de cerca de 1,4 toneladas, ha explicado la subdelegada del Gobierno en Málaga.

En este punto, Gámez ha indicado que el Gobierno ha comenzado ya con el procedimiento de contratación pública para los alimentos del Programa 2019. El consejo de Ministros autorizó el pasado 28 de septiembre el suministro de alimentos por parte del FEGA para el plan del próximo ejercicio por un importe superior a los 100 millones de euros, cantidad que supone un incremento del 17,5 por ciento respecto a los fondos destinados este año a este proyecto.

Por su parte, Jiménez también ha valorado el trabajo de los voluntarios y ha incidido en que "la crisis no ha pasado; desgraciadamente son muchas las familias que demandan ayuda".

Asimismo, ha explicado que al año reparten 6,5 millones de kilos de forma asidua; además de que trabajan "por paliar la situación de vulnerabilidad de las personas, por reinsertar en el mercado laboral a personas necesitadas y por luchar contra el despilfarro alimentario, que desgraciadamente se sigue produciendo". "Hay mucho trabajo por delante", ha afirmado.

FEGA

El FEGA ha comprado este año mediante un procedimiento de licitación pública más de 91,5 millones de kilos de alimentos básicos. "La cesta de productos es de fácil transporte y almacenamiento. Son poco perecederos y permiten que las personas beneficiarias puedan preparar fácilmente una comida completa para una persona o una familia con varios miembros, incluidos bebés", ha apuntado la subdelegada.

En el actual Programa de Ayuda Alimentaria a las Personas más Desfavorecidas hay 14 alimentos -arroz, alubias blancas cocidas, aceite de oliva, galletas o tarritos infantiles de fruta y de pollo, entre otros- y para el año que viene está previsto introducir otras variedades como conservas de sardina y de carne, garbanzos cocidos o batidos de chocolate.

Este programa está cofinanciado por el Fondo de Ayuda Europea para los más Desfavorecidos (2014-2020), que persigue promover la cohesión social y reforzar la inclusión social, además de contribuir al objetivo de reducir el número de personas en riesgo de pobreza y exclusión en la Unión Europea.

La subdelegada ha agradecido el trabajo que desarrollan las dos plataformas asociadas de distribución para que los alimentos lleguen a las personas que los necesitan.