Una cita que se enmarca dentro de la iniciativa 'PersonasXPersonas', en el que millones de personas escriben cartas o firman peticiones en favor de estas personas y que, en esta ocasión, querrán poner de relieve "la verdad y la justicia" y proteger a aquellos que trabajan por conseguir una sociedad más justa.

Amnistía Internacional cuenta para esta tarde con la presencia de Marinete da Silva, madre de Marielle Franco, concejal y activista asesinada el pasado 14 de marzo, y Renata Neder, coordinadora de investigación de Amnistía Internacional Brasil. Un acto en el que se pedirá "justicia para Marielle", con recogida de firmas, para que los autores materiales e intelectuales del crimen puedan ser juzgados.

Marielle Franco, ha explicado su madre, "luchaba con valentía en Río de Janeiro por una ciudad más justa. Defendía a las mujeres negras, a la población LGTBi y a la gente joven y condenaba los homicidios ilegítimos cometidos por la policía".

"Había que hacerla callar y por eso la asesinaron en su automóvil", ha indicado. Los indicios apuntan "a que el asesinato, en el que también murió el conductor, fue obra de profesionales y los expertos señalan que la munición usada es de la Policía Federal Brasileña".

Marielle Franco había sido la quinta concejala más votada en las elecciones de 2016. Este suceso, "el asesinato de una defensora de derechos humanos, lamentablemente, se repite con frecuencia en Brasil, donde el pasado año 70 personas defensoras de derechos humanos fueron asesinadas".

La mayoría, apunta, "son crímenes que no son investigados ni responsabilizados y esto aumenta el ciclo de violencia porque cuando se mata a un defensor de los derechos humanos se posiciona el miedo y el silencio".

Desde aquel día, su madre participa activamente de las acciones que buscan respuesta para el crimen porque como ha explicado "hay muchas preguntas sin resolver". Un asunto "muy grave" y para el que piden "un mecanismo independiente para monotorizar estas investigaciones y que estos crímenes no queden impunes".

Es "necesario" que se "garantice una investigación inmediata, exhaustiva, imparcial e independiente sobre su homicidio en el que se identifique tanto a las personas que dispararon como a quienes ordenaron su muerte esclareciendo, además, los motivos del crimen. Las personas responsables deberán comparecer ante la justicia y ser juzgadas respetando las normas internacionales correspondientes".

"Marielle quería cambiar las cosas, poner voz a aquellos que no podían, a la minoría y fue muy valiente. La única forma de hacerla callar fue asesinándola". Aún así, ha explicado, "muchos de los proyectos de Ley que fueron propuestos por ella han sido votados y aprobados después de su muerte, ha sido una inspiración para muchos no solo en su propio partido, sino en otros".

Por ello, ha reconocido, "la familia, que en un principio no queríamos que se involucrara en la política, estamos muy orgullosos de ella porque sabemos que estaba en el camino correcto".

Marinete da Silva explicará el caso de su hija y hablará de la situación de los derechos humanos en Brasil, "de la ola de acoso, intimidación y violencia contra los defensores de derechos humanos en ese país".

Se trata de ponerlo en conocimiento de la sociedad "para tomar medidas e impedir nuevas amenazas y agresiones contra estas personas que defienden los derechos humanos" y pedir "la restauración del programa de protección de los defensores de los derechos humanos en Brasil".