En un comunicado, ha explicado que en las últimas semanas se han producido "repetidas molestias" en estas áreas de reserva, ocasionadas principalmente por disparos frente al área de reserva de la Mata del Fang y por la presencia en la laguna de piraguas y pequeñas embarcaciones de recreo que, al acercarse en exceso, generan agitación de los grupos de anátidas que descansan allí.

SEO/BirdLife ha recordado la importancia de cumplir con los objetivos de conservación de l'Albufera de València como espacio de la Red Natura 2000, entre cuyos valores principales se encuentra el papel destacado para la preservación de las aves acuáticas en Europa.

Por ello, la ONG ha solicitado formalmente a la Generalitat, al Ayuntamiento y al Seprona que se tomen medidas urgentes para garantizar, cumpliendo con la legislación vigente, el papel de l'Albufera como humedal de refugio para aves acuáticas.

Reclaman por un lado aumentar con urgencia los medios para intensificar la vigilancia de las áreas de reserva de la Mata del Fang, la laguna de l'Albufera y su perímetro para garantizar su papel para la conservación de las aves acuáticas, entre ellas las catalogadas en peligro de extinción.

Por otro, exigen cumplir con los requerimientos ambientales de las aves acuáticas invernantes, manteniendo los ciclos de inundación adecuados y acordados tanto en el arrozal como en la laguna de l'Albufera durante todo el período invernal.

SEO/Birdlife ha recordado que un año más la inundación invernal de l'Albufera, conocida como 'perellonà', alcanza una superficie escasa, alejada de los niveles óptimos, "lo que genera una situación preocupante para uno de los humedales españoles más importantes".

En consecuencia, los censos de aves acuáticas invernantes están resultando bajos, especialmente en el caso de las anátidas, que encuentran pocos lugares con hábitat favorable. Durante la primera mitad de la invernada el número de anátidas ronda los 34.000 ejemplares, ligeramente superior a las cifras alcanzadas en 2017 y años anteriores.

Sin embargo, en 2018 las aves están utilizando en mayor medida las áreas de reserva: un 69,4% de las aves se encuentran en estas áreas, mientras que sólo un 30,6 % se encuentran en los vedados de caza y arrozales anexos, situación muy diferente a la de años anteriores, donde el reparto era de 39,9% en reservas y 60,1 % en espacios donde se practica la caza.

En este contexto hidrológico "desfavorable y preocupante en l'Albufera de València, por tanto, toman una especial relevancia las áreas de reserva destinadas a ofrecer lugares tranquilos para estas aves acuáticas durante el período de actividad cinegética, así como para dar cumplimiento a las responsabilidades de conservación de aves acuáticas que requieren sus diversas figuras de protección".

El área de reserva de la Mata del Fang y la propia laguna de l'Albufera suponen el principal refugio para las anátidas, hecho al que se añade la presencia en la Mata del Fang de cerceta pardilla y porrón pardo, dos anátidas catalogadas en peligro de extinción en España y que, por tanto, requieren de medidas excepcionales de conservación.